Balance final de la T2

Con sus virtudes y sus defectos (más las primeras que los segundos), concluye la serie y una segunda temporada que, sin duda, ha sido muy superior a la primera. A pesar de, en mi modesta opinión, el gran patinazo cometido por los guionistas en la resolución de la trama del asesino del martillo. Sobre eso ya hemos discutido mucho y yo no voy a añadir más.

Los productores han acertado en todos los cambios respecto a la T1:

a) El cambio de escenario principal, de los invernaderos al desierto. Le ha dado la grandiosidad que faltaba en la T1. Cómo no, el duelo final entre Héctor y Pablo debía ser exactamente allí: en el desierto. Dios y el diablo en el fin del mundo.

b) El tono mucho más sombrío de la narración (el desierto también ha ayudado a ello). Nos han regalado escenas sobrecogedoras como la de Pilar descubriendo a las rusas enjauladas en el almacén, el monólogo de Rueda con Agneska muerta, la chica rusa andando como una zombie por el desierto, la última escena de Fernando y Cristina juntos, el vídeo del informe psiquiátrico de Cristina, la pelea brutal de Fernando con los serbios... Y la que para mí ha sido la mejor escena de la dos temporadas: Pilar a punto de quemar la furgoneta con las rusas dentro. Esos segundos eternos con la cara ensangrentada, los ojos llenos de lágrimas, la cerrilla encendida... y su decisión final de huír del lado oscuro. Son este tipo de momentos los que hacen que una serie se quede en nuestra memoria para siempre.

c) Eliminar todas las interpretaciones que claramente no funcionaban, unas simplemente por que eran malos actores (Lucas-Fara), otras porque el personaje resultaba muy cargante (Marta con su rollo de madre-coraje viuda todo el día llorando y con hijo insoportable). Además, era evidente que no se podía hacer una T2 con un Héctor feliz con Marta, ayudando a Nacho con los deberes y yendo juntos a la playa el fin de semana. Marta y Nacho tenían que desaparecer de la serie sí o sí.

d) Reducir la parte romántico-sentimental al mínimo y dejarse de dramones (Héctor-Marta) o pastelones (Lucas-Fara). Han elegido emparejar a dos personas normales (Salva y Sol) en una relación normal. Una pareja que nos ha caído bien a todos y nos ha dado momentos simpáticos (la hostia que se lleva Salva por meterse en la pelea entre Sol y las chonis, o cuando Salva se lleva a Sol borracha para casa).

e) Dar galones a los mejores secundarios de la T1 (Pilar, Sergio y la familia de Lola). Y por supuesto, crear a Fernando 2.0, un villano para la historia de la ficción española.

f) Reducir el "intensismo" de Héctor (sus peleas en la T1 con el saco de boxeo eran hilarantes...).

g) Los cuatro nuevos: Pablo, Vlad, Sol y Cristina. Todos han funcionado. Y por supuesto, Cristina ha sido la gran secundaria de la T2.

h) La música. En particular la etérea y turbadora que suena en varias de las escenas más impactantes (Pilar apunto de quemar a las rusas o Héctor desplomándose malherido tras acribillar a Pablo).


Algunas cosas que yo hubiese cambiado:

1) Antes de empezar a rodar, revisar el guión, aunque sólo sea una vez.... Bueno, no quiero meter más el dedo en la llaga sobre este tema.
2) Crear una trama alrededor de la historia de la ex-novia de Héctor.
3) Dar menos minutos a la trama de la mafia serbia (que me ha gustado mucho, pero nos podrían haber contado lo mismo en la mitad de tiempo).
4) Y por supuesto, dar mucha más presencia a Cristina. Ella debería haber sido la asesina de la T2. ¿No nos gusta que los asesinos nos den miedo?. Pues ella lo ha hecho cuando le han dejado (mirad sus ojos en los dos vídeos del último capítulo).


En cualquier caso, lo justo es justo y el balance global es el de una gran T2. Es muy difícil que una serie de televisión me enganche, y mucho menos que me ponga a escribir sobre ella en un foro. Algo habrá hecho bien para conseguirlo.

Felices fiestas.