Foro El secreto de Puente Viejo
La Biblioteca (A - K)
#0
17/08/2011 13:26
EL RINCÓN DE AHA
El destino.
EL RINCÓN DE ÁLEX
El Secreto de Puente Viejo, El Origen.
EL RINCÓN DE ABRIL
El mejor hombre de Puente Viejo.
La chica de la trenza I, II, III, IV, V, VI, VII, VIII.
EL RINCÓN DE ALFEMI
De siempre y para siempre.
Hace frío I, II.
Pensando en ti.
Yo te elegí a ti.
EL RINCÓN DE ANTOJEP
Bajo la luz de la luna I, II, III, IV.
Como un rayo de sol I, II, III, IV.
La traición I, II.
EL RINCÓN DE ARICIA
Reacción I, II, III, IV.
Emilia, el lobo y el cazador.
El secreto de Alfonso Castañeda.
La mancha de mora I, II, III, IV, V.
Historias que se repiten. 20 años después.
La historia de Ana Castañeda I, II, III, VI, V, Final.
EL RINCÓN DE ARTEMISILLA
Ojalá fuera cierto.
Una historia de dos
EL RINCÓN DE CAROLINA
Mi historia.
EL RINCÓN DE CINDERELLA
Cierra los ojos.
EL RINCÓN DE COLGADA
Cartas, huidas, regalos y el diluvio universal I-XI.
El secreto de Gregoria Casas.
La decisión I,II, III, IV, V.
Curando heridas I,II, III, IV, V, VI, VII, VIII, IX, X, XI, XII, XIII.
una nueva vida I,II, III
EL RINCÓN DE CUQUINA
Lo que me sale de las teclas.
El origen de Tristán Ulloa.
EL RINCÓN DE EIZA
En los ojos de un Castañeda.
Bajando a los infiernos.
¡¿De qué?!
Pensamientos
EL RINCÓN DE FERMARÍA
Noche de bodas. (Descarga directa aquí)
Lo que no se ve.
En el baile.
De valientes y cobardes.
Descubriendo a Alfonso.
¿Por qué no me besaste?
Dejarse llevar.
Amar a Alfonso Castañeda.
Serenidad.
Así.
Quiero.
El corazón de un jornalero (I) (II).
Lo único cierto I, II.
Tiempo.
Sabor a chocolate.
EL RINCÓN DE FRANRAI
Un amor inquebrantable.
Un perfecto malentendido.
Gotas del pasado.
EL RINCÓN DE GESPA
La rutina.
Cada cosa en su sitio.
El baile.
Tomando decisiones.
Volver I, II.
Chismorreo.
Sola.
Tareas.
El desayuno.
Amigas.
Risas.
La manzana.
EL RINCÓN DE INMILLA
Rain Over Me I, II, III.
EL RINCÓN DE JAJIJU
Diálogos que nos encantaría que pasaran.
EL RINCÓN DE KERALA
Amor, lucha y rendición I - VII, VIII, IX, X, XI (I) (II), XII, XIII, XIV, XV, XVI,
XVII, XVIII, XIX, XX (I) (II), XXI, XXII (I) (II).
Borracha de tu amor.
Lo que debió haber sido.
Tu amor es mi droga I, II. (Escena alternativa).
PACA´S TABERN I, II.
Recuerdos.
Dibujando tu cuerpo.
Tu amor es mi condena I, II.
Encuentro en la posada. Historia alternativa
Tu amor es mi condena I, II, III, IV, V, VI, VII, VIII, IX, X, XI, XII, XIII, XIV, XV, XVI
#261
31/08/2011 19:51
En Galicia sigue lloviendo. Y yo sigo alicaida.
LLUEVE (Continuación)
"Llueve. Menos mal que Mariana ya ha recogido toda la ropa tendida. A ver si nos podemos ir pronto, que una empieza a estar vieja para tanta faena y está deseando llegar a casa para descansar. Para descansar, y para ver como están esos tres muchachos. Ya sé que ahora son hombres hechos y derechos, pero para mi nunca dejarán de ser mis niños. ¿Cómo estará Juan?. Pobre chiquillo, la vida no deja de golpearle. Y ahora tambien Alfonso parece triste, pero como es igual que su padre, seguro que no me quiere contar que le ocurre. Espero que por lo menos su hermano Ramiro sepa como ayudarle, como ha hecho siempre……."
"Llueve. Lleva toda la tarde lloviendo a mares. Buenos han de estar los caminos y el necio de mi hermano aun no ha vuelto a casa y madre se va a preocupar. ¿Qué se le habrá perdido por Villalpando? Nada. Sólo quiere escapar, como si al poner varias leguas de por medio pudiese dejar atrás sus sentimientos. Tonto, o mejor dicho, cobarde. Intento comprenderlo, pero no alcanzo a ver donde se han quedado sus arrestos. Intento aconsejarlo pero no me escucha. Intento animarlo, pero nadie parece poder darle consuelo. Quizás si Emilia supiera lo que está pasando….."
"Llueve. Y lo peor es que no tiene pinta de escampar. Me llevan los demonios, porque no puedo sentarme en el patio a descansar un ratito al sol. Sólo pido 5 minutos para olvidar por un momento los problemas de padre y Sebastián. No soporto ver la tristeza en los ojos del uno y el rencor en los del otro. Pero no tengo con quien desahogarme. ¡Ojalá Alfonso estuviese aquí!!. Él habría de escucharme. No sé que me pasa, que últimamente echo tanto de menos sus sonrisas y sus palabras de consuelo. Pero, claro, seguramente andará penando por esa moza que no le merece.¡ Hace falta estar ciega para no darse cuenta del hombre tan maravilloso que es!".
LLUEVE (Continuación)
"Llueve. Menos mal que Mariana ya ha recogido toda la ropa tendida. A ver si nos podemos ir pronto, que una empieza a estar vieja para tanta faena y está deseando llegar a casa para descansar. Para descansar, y para ver como están esos tres muchachos. Ya sé que ahora son hombres hechos y derechos, pero para mi nunca dejarán de ser mis niños. ¿Cómo estará Juan?. Pobre chiquillo, la vida no deja de golpearle. Y ahora tambien Alfonso parece triste, pero como es igual que su padre, seguro que no me quiere contar que le ocurre. Espero que por lo menos su hermano Ramiro sepa como ayudarle, como ha hecho siempre……."
"Llueve. Lleva toda la tarde lloviendo a mares. Buenos han de estar los caminos y el necio de mi hermano aun no ha vuelto a casa y madre se va a preocupar. ¿Qué se le habrá perdido por Villalpando? Nada. Sólo quiere escapar, como si al poner varias leguas de por medio pudiese dejar atrás sus sentimientos. Tonto, o mejor dicho, cobarde. Intento comprenderlo, pero no alcanzo a ver donde se han quedado sus arrestos. Intento aconsejarlo pero no me escucha. Intento animarlo, pero nadie parece poder darle consuelo. Quizás si Emilia supiera lo que está pasando….."
"Llueve. Y lo peor es que no tiene pinta de escampar. Me llevan los demonios, porque no puedo sentarme en el patio a descansar un ratito al sol. Sólo pido 5 minutos para olvidar por un momento los problemas de padre y Sebastián. No soporto ver la tristeza en los ojos del uno y el rencor en los del otro. Pero no tengo con quien desahogarme. ¡Ojalá Alfonso estuviese aquí!!. Él habría de escucharme. No sé que me pasa, que últimamente echo tanto de menos sus sonrisas y sus palabras de consuelo. Pero, claro, seguramente andará penando por esa moza que no le merece.¡ Hace falta estar ciega para no darse cuenta del hombre tan maravilloso que es!".
#262
31/08/2011 20:00
super lindo pepa...como siempre...
esos pensamientos valen su peso en oro... porque son los que barruntamos a solas en nuestro interior.. y que no confesamos a nadie.. olé!!!
esos pensamientos valen su peso en oro... porque son los que barruntamos a solas en nuestro interior.. y que no confesamos a nadie.. olé!!!
#263
31/08/2011 20:06
Precioso Pepa, siempre es un enorme placer leerte metida en la piel de esos personajes tan adorables.
Llueve... y no, no tiene pinta de escampar.
Llueve... y no, no tiene pinta de escampar.
#264
31/08/2011 20:15
Os llevo leyendo varios días y no me había atrevido todavía a entrar, pero hoy estoy inspirada y ahí os dejo un poquito de mi imaginación por cierto soy fan de Alfonso y Emilia y sobre ellos va el fic, espero que os guste...
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Alfonso estaba cansado de todo, no solo debía aguantar las continuas miradas entre Severiano y Emilia y los insultos de Mauricio, si no que ahora también debía aguantar que Soledad hubiera echado a su hermana y a su madre de la casona por culpa de sus propias penas.
-No te aflijas hijo, encontraremos otro trabajo.
No dijo nada, no podía siquiera mirar a su madre, ella siempre lo había dado todo por ellos ¿y como se lo pagaba él? Estando más pendiente de las faldas de Emilia que de su familia, no podía perdonarselo.
Se levanto y se marcho de su casa sin poder mirar más a su madre, era él el que debía deslomarse por ellos, para eso era el mayor, debía...
-¡Eh Alfonso! ¿Porque no te vienes a cenar con Emilia y conmigo a la casa de comidas?
Severiano caminaba con Emilia muy sonriente mientras él sentía como el corazón se le salía del pecho, quería golpearle y gritarle por lo que le estaba robando pero al final ¿que más daba? Emilia no era nada suyo y ya nunca lo sería.
-No gracias, tengo prisa.
-Pero hombre...
-¡No!
Los dos lo miraron muy contrariados por su brusca contestación mientras él les pasaba de largo, no podía, esa noche no podía poner cara de buen amigo y sonreír.
Camino y camino hasta que ya no supo donde terminaba el pueblo y empezaba el bosque, se decía que por allí estaba Carlos Castro, que había secuestrado al hijo de Don Tristán y después de su huida se había escondido por allí esperando matarlo, incluso la guardia civil rastreaba la zona en su busca, pero eso a él no le importaba.
-Con mi suerte, me lo encontrare.-se dijo a si mismo.
Siguió adentrándose en el fondo del bosque sin saber lo que allí podía esperarse o mucho peor, lo que no podría ni imaginarse.
En la casa de comidas, por mucho que lo intentara, Severiano no conseguía atraer la atención de Emilia que parecía estar muy perdida después de su encuentro con Alfonso.
-Estará bien.
Emilia lo miro y soltó la cuchara, no había probado bocado desde que se habían sentado y estaba cada vez más nerviosa.
-No se, no me encuentro bien, deberías irte a casa.
Severiano suspiro y se levantó, sabía que le pasaba a la muchacha pero no sería él el que le abriera los ojos y menos cuando la quería para él mismo.
-Esta bien, buenas noches.
Le dio un beso en la mejilla y se marcho mientras ella terminaba de recoger los platos aún muy perdida.
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Ahí esta, ya me direis que os parece.
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Alfonso estaba cansado de todo, no solo debía aguantar las continuas miradas entre Severiano y Emilia y los insultos de Mauricio, si no que ahora también debía aguantar que Soledad hubiera echado a su hermana y a su madre de la casona por culpa de sus propias penas.
-No te aflijas hijo, encontraremos otro trabajo.
No dijo nada, no podía siquiera mirar a su madre, ella siempre lo había dado todo por ellos ¿y como se lo pagaba él? Estando más pendiente de las faldas de Emilia que de su familia, no podía perdonarselo.
Se levanto y se marcho de su casa sin poder mirar más a su madre, era él el que debía deslomarse por ellos, para eso era el mayor, debía...
-¡Eh Alfonso! ¿Porque no te vienes a cenar con Emilia y conmigo a la casa de comidas?
Severiano caminaba con Emilia muy sonriente mientras él sentía como el corazón se le salía del pecho, quería golpearle y gritarle por lo que le estaba robando pero al final ¿que más daba? Emilia no era nada suyo y ya nunca lo sería.
-No gracias, tengo prisa.
-Pero hombre...
-¡No!
Los dos lo miraron muy contrariados por su brusca contestación mientras él les pasaba de largo, no podía, esa noche no podía poner cara de buen amigo y sonreír.
Camino y camino hasta que ya no supo donde terminaba el pueblo y empezaba el bosque, se decía que por allí estaba Carlos Castro, que había secuestrado al hijo de Don Tristán y después de su huida se había escondido por allí esperando matarlo, incluso la guardia civil rastreaba la zona en su busca, pero eso a él no le importaba.
-Con mi suerte, me lo encontrare.-se dijo a si mismo.
Siguió adentrándose en el fondo del bosque sin saber lo que allí podía esperarse o mucho peor, lo que no podría ni imaginarse.
En la casa de comidas, por mucho que lo intentara, Severiano no conseguía atraer la atención de Emilia que parecía estar muy perdida después de su encuentro con Alfonso.
-Estará bien.
Emilia lo miro y soltó la cuchara, no había probado bocado desde que se habían sentado y estaba cada vez más nerviosa.
-No se, no me encuentro bien, deberías irte a casa.
Severiano suspiro y se levantó, sabía que le pasaba a la muchacha pero no sería él el que le abriera los ojos y menos cuando la quería para él mismo.
-Esta bien, buenas noches.
Le dio un beso en la mejilla y se marcho mientras ella terminaba de recoger los platos aún muy perdida.
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Ahí esta, ya me direis que os parece.
#265
31/08/2011 20:22
Inmilla!! Pero que chulo!! Me ha encantado pero dime una cosa, habra continuacion, no!? No nos vas a dejar con esta congoja por lo que le pueda pasar a Alfonso, verdad!? jejeje
#266
31/08/2011 20:23
Inmilla...queremos más ... queremos más jjejejejeje
#267
31/08/2011 20:35
Veo que os ha gustado, ahi va otro trozo.
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Alfonso se paro en un claro tranquilizador, estaba en lo alto de una colina que solo jornaleros o gente muy pobre conocían ya que era su refugio y remanso de paz, de hecho él lo conocía por su padre y siempre venía aquí cuando necesitaba pensar, como en aquel momento.
Sin saber que hacer, dejo que sus emociones tomaran control de él y grito mientras las lágrimas caían por su rostro.
-¡Necesito espacio y tiempo para mi, borrar todo el dolor y que mi familia tenga un maldito momento de tranquilidad!
No se fijo que algo se movía entre las sombras hasta que se percato de un pequeño gemido que venía de unos arbustos, rápidamente se limpió las lágrimas y miro a su alrededor.
-¿Quien anda ahí?-pregunto caminando lentamente.
Aparto las ramas y se quedo boquiabierto al observar al niño que todos los militares andaban buscando, del que se habían colgado pasquines y dado recompensas por su paradero.
-¿Martín Castro?
El niño levantó la cabeza y lo miro antes de que se le ensancharan los ojos, Alfonso notó que algo andaba mal pero antes de poder darse la vuelta noto un fuerte dolor en la cabeza y todo fue negro para él...
-Te dije que no alertaras a nadie.
Martin solo pudo mirar al hombre con horror mientras Carlos le subía al caballo y luego repetía la misma acción con él.
Lejos de allí, Emilia sentía un fuerte dolor en su pecho mientras se le caía un plato y Pepa entraba a toda velocidad en la casa de comida asustada y confundida después de otra pesadilla.
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Y si, claro que continua, esto no es mas que el principio
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Alfonso se paro en un claro tranquilizador, estaba en lo alto de una colina que solo jornaleros o gente muy pobre conocían ya que era su refugio y remanso de paz, de hecho él lo conocía por su padre y siempre venía aquí cuando necesitaba pensar, como en aquel momento.
Sin saber que hacer, dejo que sus emociones tomaran control de él y grito mientras las lágrimas caían por su rostro.
-¡Necesito espacio y tiempo para mi, borrar todo el dolor y que mi familia tenga un maldito momento de tranquilidad!
No se fijo que algo se movía entre las sombras hasta que se percato de un pequeño gemido que venía de unos arbustos, rápidamente se limpió las lágrimas y miro a su alrededor.
-¿Quien anda ahí?-pregunto caminando lentamente.
Aparto las ramas y se quedo boquiabierto al observar al niño que todos los militares andaban buscando, del que se habían colgado pasquines y dado recompensas por su paradero.
-¿Martín Castro?
El niño levantó la cabeza y lo miro antes de que se le ensancharan los ojos, Alfonso notó que algo andaba mal pero antes de poder darse la vuelta noto un fuerte dolor en la cabeza y todo fue negro para él...
-Te dije que no alertaras a nadie.
Martin solo pudo mirar al hombre con horror mientras Carlos le subía al caballo y luego repetía la misma acción con él.
Lejos de allí, Emilia sentía un fuerte dolor en su pecho mientras se le caía un plato y Pepa entraba a toda velocidad en la casa de comida asustada y confundida después de otra pesadilla.
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Y si, claro que continua, esto no es mas que el principio
#268
31/08/2011 20:42
Suscribo la opinión de Gema y Librito. Continua.....por favor
#269
31/08/2011 21:17
Familiaaa¡¡ Acabo de volver de la playa (parezco una gamba xD) Voy a ver el capitulo de hoy y a seguir... ESTA NOCHE CONTINUO CON SEBAS Y SOLE Y CON ALFONSO Y EMILIA¡¡¡ Un besazoo :D Se os quiere¡¡¡ MODERADORES... LOS BANNERS YA XD
#270
31/08/2011 23:02
Ais qué chulo Alfonso ha encontrado a Martin (Castro no Montenegro...)
Queremos más queremos más queremos más jajajaja!
Queremos más queremos más queremos más jajajaja!
#271
31/08/2011 23:12
Mañana prometo más, mucho más pero...¿que va pasar? quien sabe...
#272
31/08/2011 23:24
Inmilla, qué gusto da leerte!! ¿Eres nueva en este foro? Si es así, bienvenida.
#273
31/08/2011 23:58
COMO UN RAYO DE SOL PARTE 2 (Sebastián y Soledad)
No había vuelto a verla desde que se despidieron aquella mañana y sería egoísta de su parte no reconocer que no había dejado de pensar en Soledad. Sebastián Ulloa caminaba ocioso por su habitación cuando Emilia tocó a la puerta.
- ¿Se puede?
- Pasa Emilia. Tengo que hablarte.
Emilia estaba radiante aquella mañana. Su noviazgo con Alfonso la había hecho florecer cual flor primaveral y ahora, con su blusa nueva y su cabello suelto, lucía tan hermosa que a Sebastián le impactó mirarla.
- ¿Tienes que hablarme? – Preguntó la joven Ulloa.
- Hermana, creo que soy un egoísta. Ha pasado poco tiempo desde la muerte de Virtudes y yo…
Emilia esbozó una sonrisa pícara.
- Y tú ya te has fijado en otra moza, ¿me equivoco?
- No lo sé.
- ¿De quién se trata?
- En realidad…
Justo a tiempo. Raimundo, el patriarca de los Ulloa invadió la habitación de sus vástagos como una bocanada de aire fresco en la choza de un moribundo.
- ¡Sebastián!
No habían hablado seriamente desde el momento de la confesión de Raimundo, pero Sebastián se resistía a perdonar a su padre, el asesino de su amor.
- Hay alguien esperándote fuera. – Concluyó Raimundo.
Por alguna extraña razón, el joven Ulloa salió de la habitación como una exhalación, dejando a su padre y hermana con la palabra en la boca.
Allí, en la puerta de la Casa de Comidas estaba ella. Gracias a los cuidados de Pepa había mejorado de aspecto y de ánimo y parecía deseosa de volver a ver a Sebastián.
- Soledad…
- He pensado que podríamos ir a dar un paseo por el Puente Viejo. ¿Te apetece? – Dijo riendo.
Ante la inminente aceptación del joven, Soledad se colgó de su brazo y partieron sin despedirse de la sorprendida Emilia y el patidifuso Raimundo.
- La historia se repite… - Balbuceó Ulloa.
- ¿Qué dice padre? – Preguntó Emilia.
- Nada hija, no digo nada.
Por el camino del Puente Viejo, Soledad se desahogó con Sebastián, le explicó el dolor que le supuso hablar de nuevo con Juan y recriminarle la muerte del bebé, pero le reconoció que todo el amor que había sentido por el pequeño de los hombres Castañeda, se había convertido en una completa y total indiferencia.
Sebastián por su parte, le contó su drama con el padre que lo había traído al mundo, el odio que sentía hacia él y la felicidad que sentía por el noviazgo de Emilia y Alfonso.
- ¿Qué hacéis vosotros dos juntos? – Preguntó una voz sorprendida que los acusó desde una linde del bosque.
CONTINUARÁ
No había vuelto a verla desde que se despidieron aquella mañana y sería egoísta de su parte no reconocer que no había dejado de pensar en Soledad. Sebastián Ulloa caminaba ocioso por su habitación cuando Emilia tocó a la puerta.
- ¿Se puede?
- Pasa Emilia. Tengo que hablarte.
Emilia estaba radiante aquella mañana. Su noviazgo con Alfonso la había hecho florecer cual flor primaveral y ahora, con su blusa nueva y su cabello suelto, lucía tan hermosa que a Sebastián le impactó mirarla.
- ¿Tienes que hablarme? – Preguntó la joven Ulloa.
- Hermana, creo que soy un egoísta. Ha pasado poco tiempo desde la muerte de Virtudes y yo…
Emilia esbozó una sonrisa pícara.
- Y tú ya te has fijado en otra moza, ¿me equivoco?
- No lo sé.
- ¿De quién se trata?
- En realidad…
Justo a tiempo. Raimundo, el patriarca de los Ulloa invadió la habitación de sus vástagos como una bocanada de aire fresco en la choza de un moribundo.
- ¡Sebastián!
No habían hablado seriamente desde el momento de la confesión de Raimundo, pero Sebastián se resistía a perdonar a su padre, el asesino de su amor.
- Hay alguien esperándote fuera. – Concluyó Raimundo.
Por alguna extraña razón, el joven Ulloa salió de la habitación como una exhalación, dejando a su padre y hermana con la palabra en la boca.
Allí, en la puerta de la Casa de Comidas estaba ella. Gracias a los cuidados de Pepa había mejorado de aspecto y de ánimo y parecía deseosa de volver a ver a Sebastián.
- Soledad…
- He pensado que podríamos ir a dar un paseo por el Puente Viejo. ¿Te apetece? – Dijo riendo.
Ante la inminente aceptación del joven, Soledad se colgó de su brazo y partieron sin despedirse de la sorprendida Emilia y el patidifuso Raimundo.
- La historia se repite… - Balbuceó Ulloa.
- ¿Qué dice padre? – Preguntó Emilia.
- Nada hija, no digo nada.
Por el camino del Puente Viejo, Soledad se desahogó con Sebastián, le explicó el dolor que le supuso hablar de nuevo con Juan y recriminarle la muerte del bebé, pero le reconoció que todo el amor que había sentido por el pequeño de los hombres Castañeda, se había convertido en una completa y total indiferencia.
Sebastián por su parte, le contó su drama con el padre que lo había traído al mundo, el odio que sentía hacia él y la felicidad que sentía por el noviazgo de Emilia y Alfonso.
- ¿Qué hacéis vosotros dos juntos? – Preguntó una voz sorprendida que los acusó desde una linde del bosque.
CONTINUARÁ
#274
01/09/2011 02:03
Ahora leo los demas pero tenia que decirlo
SIAMESA CARIÑO!!!!!!! Me has emocionado otra vez!!!! Una vez más y no sera la última porque cada vez es mejor, y mira que lo creia imposible!!! Te superas.
Si quieres te mando la calor de Almería pa alli arriba, te la cambio por un poco de lluvia que me lave el coche!!!!!
Antojep me gusta!! Sigue un pokito mas con sole y sebas, que yo le estoy cogiendo tirria a la sole de la novela y la tuya me gusta mas, juan por el cotrario siempre me parecio cabezota como el solo, un tanto egoista y bastante tonto, pero pese a haberse equivocado, veo peor lo que hace sole y sin fundamentos que lo que ha echo el asi que siguela please!!!
inmilla17 me ha encantado, alfonso, el asilvestrao, ¡chip! tiene que ser quien rescate a martincito!!!!
SIAMESA CARIÑO!!!!!!! Me has emocionado otra vez!!!! Una vez más y no sera la última porque cada vez es mejor, y mira que lo creia imposible!!! Te superas.
Si quieres te mando la calor de Almería pa alli arriba, te la cambio por un poco de lluvia que me lave el coche!!!!!
Antojep me gusta!! Sigue un pokito mas con sole y sebas, que yo le estoy cogiendo tirria a la sole de la novela y la tuya me gusta mas, juan por el cotrario siempre me parecio cabezota como el solo, un tanto egoista y bastante tonto, pero pese a haberse equivocado, veo peor lo que hace sole y sin fundamentos que lo que ha echo el asi que siguela please!!!
inmilla17 me ha encantado, alfonso, el asilvestrao, ¡chip! tiene que ser quien rescate a martincito!!!!
#275
01/09/2011 09:32
Antonio... dale más caña jajajaja.. el juan que aprenda lo que ha perdido por tonto y me reitero.. el Sebas tiene que darle más caña a la paka2, muy buena continuación... pero como siempre.. queremos mas ;O) jejejejeje
#276
01/09/2011 14:40
Cuando despertó, Alfonso sintió un fuerte dolor en la nuca, por lo que tardo varios segundos en enfocar donde se encontraba, era un lugar oscuro, sin ventanas ni nada de luz, pero estaba en movimiento, por lo que dedujo era una carreta.
-¿Esta bien?
La voz del niño se hizo eco en sus sentidos mientras recordaba lo que le había pasado, estaba deprimido, la montaña...Martín.
-¿Martín? ¿Eres tu?
-¿Sabe quien soy?
No podía creer su suerte, había salido a despejarse y acababa encontrándose con el hijo de Don Tristan y su peor enemigo.
-Si...eres Martín Castro, el hijo de Don Tristan.
-¿Conoce a mi padre? ¿A venido a por mi?
Por su voz, Alfonso podía notarlo asustado y con ganas de llorar, estaba en una esquina oscura mientras sostenía una peonza fuertemente contra él.
-Pobre niño, lo que debe estar pasando.-pensó.
Intento moverse para abrazarlo pero la cabeza le dolía demasiado, además estaba atado contra uno de los extremos de la carreta.
-No se mueva, esta sangrando y la carreta tiene agujeros en el suelo.
-¿Agujeros?
-Si, cuando la otra se averió, robo esta a un pobre vagabundo.
Alfonso miraba al niño mover sus manos nerviosamente, como si en cualquier momento ese bastardo fuese a aparecer y hacerle cualquier cosa, estaba pensando en eso cuando la carreta se paró de repente.
A los pocos segundos, Carlos Castro apareció vestido de vagabundo y miro directamente al niño que no hizo más que encogerse.
-No digas ni una palabra, y tu.-se giro mirando a Alfonso.-Si abres la boca, mataré al niño, ¿entendido?
Cerró de un golpe y volvió donde estaba, al principio no supo porque les había obligado a callarse hasta que escucho los cascos de los caballos.
-¿Guardias?
Debía pensar rápido en algo, quizá si dejaba pistas podrían econtrarlos, por Emilia sabía que Pepa y Tristan estaban buscando al niño y no descansarían hasta encontrarlo, sin pensarlo, le hizo una señal al niño para que tirara la peonza y luego le quitara el pañuelo ensangrentado y también lo echase por el pequeño agujero con la esperanza de que alguien lo encontrase.
-¿Esta bien?
La voz del niño se hizo eco en sus sentidos mientras recordaba lo que le había pasado, estaba deprimido, la montaña...Martín.
-¿Martín? ¿Eres tu?
-¿Sabe quien soy?
No podía creer su suerte, había salido a despejarse y acababa encontrándose con el hijo de Don Tristan y su peor enemigo.
-Si...eres Martín Castro, el hijo de Don Tristan.
-¿Conoce a mi padre? ¿A venido a por mi?
Por su voz, Alfonso podía notarlo asustado y con ganas de llorar, estaba en una esquina oscura mientras sostenía una peonza fuertemente contra él.
-Pobre niño, lo que debe estar pasando.-pensó.
Intento moverse para abrazarlo pero la cabeza le dolía demasiado, además estaba atado contra uno de los extremos de la carreta.
-No se mueva, esta sangrando y la carreta tiene agujeros en el suelo.
-¿Agujeros?
-Si, cuando la otra se averió, robo esta a un pobre vagabundo.
Alfonso miraba al niño mover sus manos nerviosamente, como si en cualquier momento ese bastardo fuese a aparecer y hacerle cualquier cosa, estaba pensando en eso cuando la carreta se paró de repente.
A los pocos segundos, Carlos Castro apareció vestido de vagabundo y miro directamente al niño que no hizo más que encogerse.
-No digas ni una palabra, y tu.-se giro mirando a Alfonso.-Si abres la boca, mataré al niño, ¿entendido?
Cerró de un golpe y volvió donde estaba, al principio no supo porque les había obligado a callarse hasta que escucho los cascos de los caballos.
-¿Guardias?
Debía pensar rápido en algo, quizá si dejaba pistas podrían econtrarlos, por Emilia sabía que Pepa y Tristan estaban buscando al niño y no descansarían hasta encontrarlo, sin pensarlo, le hizo una señal al niño para que tirara la peonza y luego le quitara el pañuelo ensangrentado y también lo echase por el pequeño agujero con la esperanza de que alguien lo encontrase.
#277
01/09/2011 14:43
inma!!! genial tu fic!!! por cierto... eres la inma que yo creo que eres, verdad???? jajajajajaja
#278
01/09/2011 14:45
Toma ya!! Si es que mi Alfonso es más listo que el hambre!! Inmilla, no nos dejes con esta intriga, porfi!!
#279
01/09/2011 14:47
Soy la inma que crees jajajajaja te imaginaras la sorpresa que me lleve ayer cuando te vi jajajaj
Tranquila Artemisilla, no estareis asi por mucho tiempo.
Tranquila Artemisilla, no estareis asi por mucho tiempo.
#280
01/09/2011 14:48
CREO, juraría, que he conseguido arreglar el post... xD
No, ha sido un espejismo. xDDDD
No, ha sido un espejismo. xDDDD