Borradores/críticas inacabadas.

No sé en que vagón iría exactamente en el tren de Txarly, pero lo que puedo asegurar es que mi diez no es para nada una exageración, pues me he dado cuenta de que con cada vez que veo esta película, más me gusta. No falla, ya no me quedan dudas, estoy delante de una obra maestra, muy pero que muy cuidada, una película poseedora de una inteligencia increíble, prácticamente cada escena desprenden un talento para inmortalizar el acontecimiento de los sucesos muy poco visto en este tipo de películas. Es dura, cruda y violenta, la evolución de los personajes, el cómo, su actitud desprenden una triste ironía que el realizador ha sabido imprimir a las mil maravillas en su desgarrador retrato. Ya desde nada más comenzar cuando ves estampada esa silueta de un tren que es todo rojo en un fondo negro, eso ya es un preludio de lo que vas a ver a continuación, una aterrador y perturbador largometraje que presenta innumerables bazas, una escalofriante sensación de terror y una profunda y constante inquietud, acompañada por unos personajes concretos que de una forma u otra aseguran destilar sus enunciados con dureza o de tal forma que su comportamiento suponga todo un impacto para el espectador. Desde la esencia de Manny, que se hace eterna e indisoluble, cuyo duro y violento carácter, al borde de la locura lo han ido forjando numerosas adversidades (como él mismo muy bien dice: Lo que no me mata, me hace más fuerte) hasta el tonto comportamiento de la secretaria acostumbrada a vaguear en su trabajo en lo que la tragedia evoluciona de parangón.

Pero sin duda lo mejor de la película es Manny y todo lo que afecta directamente a su entorno, desde el momento en el que la película parece perfilarse hacia en duro drama carcelario (que lo es, va de un tren, diréis, pues no, los minutos del metraje que transcurren dentro de la cárcel cobran una fortaleza de dimensión descomunal así como una relevancia fundamentales) hacia la huida, su actitud, como habla con el débil Eric Roberts, su hombría, su brusquedad, su profunda amargura desengañada que no es más que el escalafón más grueso que insensibiliza su piel e inhumaniza su corazón y que supone todo un auténtico espectáculo para el espectador. A mí me ha enamorado su forma de ser. Y Eric Roberts se mimetiza tan bien con su entorno, el pardillo que le da más bola aún al salvaje pero sin darse cuenta, creyendo que le va a hacer caso. Todo de una manera tan natural, tan explícita. Yo me quedo antes con la fuerza natural de Manny, antes que con Eric, el que en un desesperado ademán de parecerse a Manny trata mal a la pobre chica que se encuentran en el tren, - justo como cree que haría Manny, - para luego terminar la película abrazado a ella, mientras Manny afronta su destino al lado del incansable Alcaide, un hombre con la entereza y el carácter suficiente como para dirigir una cárcel y gritar, sin titubear un atronador 'Sois basura', haciendo que su personaje, por muy malos matices que pueda presentar, también sea objeto de tu admiración, o al menos que te resulte agradable.

¿Para la sobremesa de Antena 3? Pues no! Les ha valido para el prime time!

Manual para ligar con adolescentes de ciudad:

Ya no vale eso de acercarse con un talante entre temerario y meloso y protagonizar el siguiente episodio:

-Oye, eres nueva de por aquí. ¿Te vienes esta noche a mi casa para una causa benéfica para los africanos más necesitados?
-Mmm, no sé... Mi mamá viene pronto a casa.
El malote esboza una notoria mueca de decepción.
-Ainsss, pues que pena, ¿no?

Justo en ese momento suena el superfashion megaguay 'juguetito' de Jenni. ¿Quién va a ser? Pues es su mamá, que le dice que se tiene que quedar a doblar turno en el hospital. Claro, como es nueva se deja explotar, no sea que vaya a empezar a caerle mal a la gente de la zona... Y entonces la tontita Jenni contesta al ansioso pene con piernas que se muestra esperanzado.

-Vaya... ¡qué sorpresa! Pues entonces... ¡creo que siiiiiiiiii, que me voy a poder a acercar!
-Pues perfecto.

Y deja constante todo su encanto de chico americano para que los espectadores nos deleitemos y suspiremos por lo guay que es...

Y cuando la tontita Jenni llega a la 'causa benéfica' se encuentra con un panorama de lo más solidario, botellas de alcohol que son consumidas, musicote del buebo bueno sonando a pleno pastizal por las inmediaciones de la kilométrica choza. Se ve que la chica hace poco que ha dejado de chuparse el dedo. Cantará fenomenal pero tonta es un rato.

-¿Y la organización benéfica?
-Ah, - dice ruborizándose un pelín, - es que no te lo había contado. ¿Sabías que mi padre dona 1000$ al mes a una ONG?

¡Cáete para atrás! Qué compromiso señores, esa es la actitud! Ole tus huevos y ole tu arte, mi niño!

Pero a la chica no se la ve muy entusiasmada. Aparte de tontita y alelada es además sosa, lo tiene todo. Así que no se la ve muy integrada en esa vorágine de besos gratuitos entre chonis descerebradas y aprendices de cañis pijos, por lo que se va a hacer caso a la primera que no ha aguantado el 'subidón' y está potando tirada en una esquina, hecha un asco. Pero el anfitrión, siempre avisapdo, la ve sola y cree pillar la indirecta y va al ataque. No se corta ni un pelo, va a saco y recibe una obscenidad a cambio:

-Gilipollas!

Prueba suerte de nuevo sometiendo a la joven con sus brazos musculados contra el seno de su cama, dando por sentado que acabará 'triunfando'...

... pero no amigo, esta no es la actitud.

Para encandilar a las niñas de ciudad recién llegadas a tu pueblo debes ser un silencioso ermitaño a lo Edward Cullen y decir sandeces para ir de sensible, así como regalar piropos gratuitos, pero no en plan camionero bocazas ('Niññññña, quién fuese borracho para verte dos veces) sino ser lo que se conoce como un noño, basicamente.

Es decir, recoger a la chica en medio de una carretera desierta y si ella te dice que canta, decir:

-Esta mañana te oí cantar...

A lo que ella te responderá, sorprendida:

-¿Pero cooooooomo? Si mi casa está a tomar por culo de la tuya.

Da igual, tú debes decir que aún así la has oído. Y añade que te gusta levantarte pronto para poder escuchar tranquilo tus propios pensamientos, mientras el resto de la gente está durmiendo todavía. Y no olvides decir que su música te parece bella, y ríete ante su comentario de como dijeras lo contrario sería ella la que lo descuartizaría, (justo de la misma manera que hace él con rubias que se va pillando a su camino, a lo asesino de la I-5), para hacer sentirla una chica lista e ingeniosa...

¿Lo ves? Ya la tienes en el bote...

Y luego para hacer amigas es también muy fácil, acá también un ejemplo gráfico.

Te acercas al día siguiente al fiestuqui guapo del más ricachón del pueblo a la más margi de la clase (que es precisamente la que estaba potando) y espera a que ella te dé las gracias por arroparla y pregúntala: ¿Oye, Susan, pero tú que haces con esos capullos? Y ella, comulgará contigo, creyéndo que por fin ha encontrado al consejero espiritual que llevaba buscando durante sus anteriores 16 desgraciados años de vida. Por fin ha encontrado a la persona de la que poder ser su 'alma gemela' y compartir confidencias garabateadas en bolígrafos de colrines en su diario enforrado en corazoncitos y de maromos depilados. Esta es la mía!

Especial atención a sus conversaciones, dignísimas de ser equiparadas con las que mantuvieron Nietzsche y Schopenhauer en sus años mozos:

-Ese Mike es un capullo.
-Y un gilipollas.
-¡Eso! Un capullo y un gilipollas!
-¡Muy gilipollas!

A lo que se acercan dos chavales a los que les gusta mucho la música. Uno toca el ukelele y el otro le da a la danza folklórica. Y pregunta (sin conocer de nada a la chica):

-¿Oye, te gustaría unirte a nuestro grupo de música?

A lo que la chica tonta saca todo el genio que lleva dentro y responde desafiante:

¿Sois lo suficientemente buenos para poder tocar conmigo?

UUUOOOOOOOOOOOO! ¡QUÉ ROTURA! Ahora me acuerdo de los unineuronales berreando como anm

Tu crítica
Tu crítica no es válida
Estimado usuario, Muy interesante su batallita, pero creemos que no habla en absoluto de la película de la cual hace crítica, por tanto, no podemos validársela. Gracias y un saludo. Equipo de validación de FilmAffinity.
Porque a todos nos gusta jugar con nuestras espadas de colorines.
28 de Mayo de 2014 0 de 0 usuarios han encontrado esta crítica útil
A quién no le gusta jugar con su espada de colorines? Da igual quién seas, de dónde provengas, lo que está claro es que es eso de sacarle brillo a tu propia espadita es una de las cosas más placenteras del mundo. Se dan casos de algunos que al tener tanta entrega por la labor han llegado a sacarle brillo a las de otros, que es algo, si me permitís el comentario, ya no tan normal. Y una 'guerra de espadas' ya ni te cuento, pero en una tienda de campaña... nunca se sabe.

Vale, vale, jugar con las espadas mola. Yo cuando tenía 8 años me encantaba enrollar mi cuaderno y zurrarme con el de al lado, pero de ahí a un ocho con uno en Filmaffinity... algo no va, y más teniendo en cuenta de lo que tenemos delante es un lamentable esbozo de frikismo infinito, que algunos denominan 'ciencia-ficción' y que presenta una calidad muy inferior a la de los dibujos animados que se emiten por la tele, como Caillou o Dora la exploradora. Porque esos va dirigido a niños de 5 años y es más o menos NORMAL, pero ESO y todo el fenómeno que se ha montado alrededor NO es NORMAL, o sea, que es ANORMAL.

Voces metálicas que dicen paridas como 'Kuke, yo soy tu padre' y sentir admiración que llega hasta los niveles de fanatismo ciego, como si esto fuese otra puta religión más (lo que ya faltaba) por todos esos seres deformes bicéfalos, con máscaras o lo que demonios sea eso que lleven y por todas sus peripecias urdidas en la mente de un friki que se ha vuelto un multimillonario arrogante y amoral yo no lo veo normal, no me lo parece. Y además el reconocimiento mundial que ha alcanzado toda esta mierda hasta llegar a pasar a la historia y que agloba a los frikis de toda clase y ser es algo que me produce irritación y enojo, ver a tu lado como el mundo se va a la mierda.

Expuesta ya mi percepción sobre semejante esperpento, mi buen instinto de analizador de las causas me llama a cavilar sobre ¿a qué tipo de público le puede gustar eso?, porque es que joder, que es un 8,1. Como diría un amigo mío: "¡Cómeme los huevos!"

Y para tratar de transmitir e incluso ilustrar acerca de lo que pretendo averiguar, esclarecer o llegar al centro de la verdad del asunto que aquí trato, voy a recurrir a una experiencia vivida, un breve episodio que quiero compartir, y para así saciar mi vena investigadora, que me pide cavilar sobre el asunto de a quién demonios le puede gustar eso. Eso sí, la brevedad es un concepto mi ambiguo, y todos, incluído yo, tenemos una concepción determinada de ese concepto.

--Hace una cosa de unos cuantos años ya, me veo obligado a hacer un trabajo en grupo (algo que se me da 'muuuuuy bie-e-e-en, mentira se me da de culo) para el tercer trimestre de la asignatura de Biología. Andaba necesitado de nota, como siempre, rondaba por ese cuatro que tú crees que se hace cinco, pero que no. Y necesitaba hacer bien este trabajo. Y ahora llega la pregunta del millón. "¿Y con quien me po-o-ongo?" Por un lado tenía la opción de emparejarme pues con la gente con la que me emparejo siempre que hay que hacer un trabajo de este tipo, pero dado que necesitaba aprobar y lo único que conseguiría de ponerme con los que quería ponerme era acabar con el culo manchado de pegamento y las cara pintada de rotulador rojo, pero aprobar no, recurro a la opción B, un grupillo de chicos con pintas raras que no paran de cuchichear entre ellos con sus cabecitas gachas. Una cosa constante. Y en mi curso había 4!

Bueno, me digo, si me pongo con ellos ya tengo a alguien que me haga el trabajo... Así que inspiro hondo, me acerco a ellos y pregunto tartamudeando algo:

-¿P-puedo hacer el trabajo de biología con vosotros? - Estoy tenso, ¿qué demonios me pasa?

Se miran entre ellos (eran tres chicos y una chica, pero vamos la chica era como si fuera uno de ellos más) y uno me dice con una amplia sonrisa de oreja a oreja, ¡Sííí! Yo, un poco alelao, devuelvo la sonrisa, y quedamos en la biblioteca por la tarde, para el trabajo había que traer un cacho de cartulina (de cacho nada, era una DIN A2, y había que pintarrajearla dibujando los componentes de la célula y escribir cuatro líneas debajo de cada dibujo, una chorrada, vamos). Como yo dibujaba de culo, otra cosa que se me daba mal (y se me da) traje yo todo el material.

Pues ale, voy p'allá, me dije, después de comprar el cacho de cartón ese (¡era enorme!) y guardarme los 1,60€ de cambio, de los 2 que le había sacado a mi madre, alegando que se trataba de una cartulina de 'dimensiones desmesuradas'. Me presento, media hora tarde, la puntualidad tampoco es una de mis virtudes, y pregunto:
-¿Qué hay que hacer?
-Pues verás - me dice uno, el más friki de todos, moviendo mucho la boca - tienes que dibujar una célula, - sin dejar de mover la boca de esa manera tan extraña, pero en cuyas instrucciones se distinguía un entusiasmo inequiparable.
-¡Déjale!, - salta la niña que llevaba gafas. - *****, me dice, tú escribes, que habías comentado que tenías buena letra.
Yo la dirijo mi amplia sonrisa y digo:
-Vale.
Bueno, esto tampoco está tan mal, pienso en lo que voy taladrando la cartulina con mi bolígrafo... Que a lo tonto consigo el aprobado. Voy a hablar de algo con los chavales que son mu majos. Las cabecitas gachas dejaron de cuchichear y se incorporaron cuando les pregunté:
-¿Qué os gusta hacer? ¿Jugáis al fútbol, qué pivita os gusta de la clase...?, y cosas así, típicas, ya sabéis. Enseguida me percaté de que estaba yendo por un terreno inadecuado. Un rato después de escuchar sus inseguras respuestas sin fundamento ni convicción ni demasiado entusiasmo, me pongo a hablar de otras cosas más afines a ellos, jactarme que a mis 14 años (los que creo que tenía por entonces) ya me había leído los siete libros de Harry Potter.
-Sí, sí, - decía ufano, sonriéndome. - Los siete.

CONTINÚA EN SPOILER.
spoiler
Me miraron como sin darle demasiada importancia y se decían entre sí.
-Joé, pos yo hace mucho que me terminé los de Tolkien. ¿Iban a sacar uno nuevo, no?
-Ah, sí, sí, sí, yo me lo voy a cumprar. Y me suena algo de que van a hacer más películas, ¿no?
-Sí, humbre, y de Star Wors también van a hacer más películas, pero qué pena, ya no va a ser basado en la histuria original...
-Hablando de Star Wors, ¡mira que carpeta más molona me han comprado! - Y saca una especie de cuaderno forrado de esas frikadas espantosas...
-Ala, que chulo...
-Me lo quise coger de otro color, azul oscuro con Darth Vader tuneado, pero es que se había acabado.
-Vaya...
Yo, atónito y con cara de empanado, comprobaba como me estaba quedando fuera de la conversación. Balbuceé algo y entonces me preguntan, como hiena que se tira al cuello de un ñu inerme:
-¿Y tú te has leído El Señor de Los Anillos? - Y yo digo:
-Nou.
-Pero si mola cantidad. ¿Y Star Wars? ¿Eso sí no? ¡Es todo un clásico!...
-Nu, - vuelvo a decir, yo, mirando a la mesa.
-¿Habrás visto las películas?
-Nu.
Entonces se hace como una especie de silencio en toda la jodida estancia y me siento como un condenado al infierno, siendo juzgado por Lucifer, en lo que todos me empezaron a mirar atentamente, como si fuera una especie de insecto desconocido en la mesa de un laboratorio. Y encima estaba empezando a sudar.
-¿NO TE GUSTA NI STAR WARS NI EL SEÑOR DE LOS ANILLOS?
-Nao, - digo, - pero me gusta ver pelis. - En efecto, ya desde esa edad me gustaba ver cine, más que otras cosas. Prefería las series de Antena 3, pero ya por entonces mi vena cinéfila se estaba desarrollando y se hacía notar. - ¿Os gustan las de acción? ¡Menuda pasada! Yo, cada vez que dan una por la tele, vibro en el sillón, me vuelvo loco, buah, es que es una cosa...
Los 4 me miran en silencio atentamente y los de las mesas de al lado también me miraban.
'Ouch', me quedo, a lo Homer Simpson. 'Vaya, parece que aquí también voy por terreno intransitado, sí, definitivamente, voy mal encaminado. Corre, piensa, di algo, no te quedes callado, que si no estos se van a pensar que eres un gilipollas integral.
-Pues a mí de pequeño me gustaba Shin Chan...--

Lo cierto es que sería engañarme alegar que solo los sujetos como los que os he descrito son los únicos que consumen este tipo de películas, tengo colegas y conocidos que lejos de hacerle asco a producciones de esta temática, las disfrutan. Y en el fondo no hay nada malo, lo respeto. Lo que pasa es que a veces me cuesta asimilarlo. Una cosa que me disgusta tanto que convenzca a todos, no puede ser. Por eso, cuando veo las repercusiones de todo esto, y más en concreto de esta saga, al ver que han montado un parque temático colosal de eso y que genera miles de millones de dólares de beneficios, me digo: "Paren el carro, que me quiero bajar."

Saludos para todos y muchas gracias.
Me_Creo_Rambo
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Deberían cambiar el nombre del foro a 'Foro Moore'

Pero a que está entretenido que te cagas lo que escribo??

l carisma que tiene Charles Bronson al comerse un helado.
Es que es impresionante. Todo comienza con que Charlie anuncia que va a la tienda a compararse un helado.

Entonces de repente es como su todo el mundo se parase y el silencio se apoderara de todo y de todos para prestar atención a como Charles coge un helado y se lo pasa a una niña que había por ahí y luego se coge otro para él. Después comunica al dependiente en un amable ademán de que se puede quedar con el cambio. Después, nuestro bigotudo favorito sale del establecimiento y de un solo mordisco devora medio polo. Heroicidad máxime.

Pero ojo, no todo va a ser tan bonito, pues hay unos impresentables esperando afuera que ven a un viejo de aspecto imbécil 'que mira mucho', y después se da la vuelta y se marcha, llevando colgada por un brazo una cámara Nixon.

"Menudo tontopolla", se piensa el grupo de delincuentes, "este gilipollas no sabe dónde está". Por lo que el que parece ser uno de los cabecillas se acerca corriendo a él, y sale corriendo tras arrebatársela. Charles entonces se saca un arma, y se espera a que se aleje y ¡pum! le mata. No se molesta en ir a recoger la cámara, por lo que queda clarísimo que no era más que un insignificante señuelo que le pudiera dar una excusa para matar a un impresentable. Y un acto que seguramente si sucede un día como hoy y en este país, seguro que originaría mucha polémica, pero sin embargo lejos de eso, salen distintas secuencias y planos durante dos minutos de como la gente del barrio aplaude, vitorea y adora a la figura de Bronson pero haber matado a un chico que solamente le ha robado una cámara...

Sin embargo la peli mola. No llega a ser todo lo violentamente que tu querrías, pues yo estaba esperanzado de que Bronson cogiera luego al final la ametralladora que es buena y que esparciese los miembros de toda esa chusma por todo el barrio, ya sucísimo y destrozado de por sí, pero no, la realización no llega al ser todo buena, pues en muchas ocasiones, cuando Bronson dispara, solo sale como el otro cae, sin más indicios de haber recibido el impacto de bala. El servidor que lo lea quizás se

Mala adaptación de esa historia en la que un monstruo silencioso mata y origina daño

Un arranque que decepciona y que deja patentes unos diálogos flojos y un doblaje malo ya podría servir de inequívoca anticipación de lo que vamos a ver es un filme descafeinado en cierta medida y fallido, prácticamente a todos los niveles. Creo que sí que se llegó a estrenar en los cines, no obstante de ser así, la recaudación fue discreta, pues el hecho de que se haya estrenado en la televisión tan solo un año después y en el late, es un indicio poco alentador, sin embargo yo decidí apostar por la historia y por los actores. La historia (el guión) y los actores es lo que en buena medida salvan en parte el largometraje. La actuación de Nicolas Cage tiene buen propósito, sin embargo no es suficiente para llegar al aprobado. John Cusack está muy flojo, cuando es acusado de los crímenes que cometió, sus argumentaciones de defensa suenan poco convincentes, y es evidente que a la película le falta violencia para situarnos mejor en ese dantesco escenario, y el sadismo tiene que ser necesariamente mostrado en una película de semejantes características. Soy un defensor de que si se nos quiere hacer llegar algo, sea transmitido el mensaje en toda su integridad, hasta las últimas consecuencias, no vale quedarse a medias. No estoy haciendo una apología de la violencia extrema ni mucho menos, pero quiero decir que el filme es conservador a ese respecto. Apuestas tan poco ambiciosas y de serie B como incluso "El asesino de la I-5" se colocan por encima de esta, en principio más estimable solo por ese hecho, de saber introducir al espectador en esa espiral de inhumanidad, en lo que es un buen ejercicio de introspección al que es sometido el espectador. En contrario, esta 'Caza al asesino' se queda en un frío relato que no se sabe muy bien si de verdad pretende sumergirnos a los adentros de una historia escabrosa, desgarradora y espeluznante, de la que se pueden extraer muchas reflexiones interesantes o tan solo de mostrarnos con frialdad y casi indiferencia esa terrible historia. Sin embargo las pretensiones seguro que no son tan desabridas, sino que simplemente ha fallado la realización de ese guión, bueno, existente sobre la mesa, por diversos motivos posibles.

He comentado que John Cusack no ha hecho un trabajo excesivamente bueno, sin embargo me ha gustado ver esos momentos en los que ejerce de cazador, siniestro y sigiloso, todo un auténtico monstruo, siendo en realidad un tipo tranquilo, sosegado con esas gafas que le dan una apariencia de hombre cansado y algo enfermo...

Pero enfermo no está, de eso no hay ninguna duda. Y de ahí extraigo otro aspecto que me ha decepcionado, pues no ha habido ningún numerito por parte de Cusack en ese interrogatorio incisivo, cuando lo había todo para su realización. Me refiero a un juego cruel por parte de Cusack, ya sabiendo este que está contra las cuerdas, que jugase un poco con las barbaries que ha hecho, dejando así un perfecto y espeluznante vestigio de toda la crueldad y maldad que encierra su desquiciada persona.

Solamente es un hombre que no siente, espero, porque si lo hace, no es normal... Debería de estar muy muy trastornado. Para percatarse de lo que hace al 100% y ser consciente de que está disfrutando del daño que al que les está sometiendo a esas pobres mujeres indefensas, seres débiles a los que las circunstancias de la vida además las empujan, -por si fuera poco,- a las garras de los vicios, perros fieros de las debilidad, con el desesperado afán de hallar una especie de redención que las haga olvidar, aunque sea por un momento, lo miserable que es su existencia, y todo eso, es sencillamente imperdonable.

¿Qué clase de martirios y rechazos habrá tenido que pasar ese hombre en su vida para llegar a degenerar hasta semejante estado? Porque no olvidemos que todos nacemos únicos, buenos y maravillosos. Pero claro, se me olvidaba que si en algo somos competentes los humanos es en mutilarnos tanto física como psíquicamente, de manera continua y mutua además, cuando lo tenemos todo para hacer justo lo contrario, que yo diría que es una actividad mucho más bonita. Una lástima. Porque ese hombre en principio tampoco era culpable de nada.

En su mano está la posibilidad de mutilar con ganas a esa débil puta o la de ayudar a esa persona, justo como lo hubiera hecho si se hubiera desarrollado en un entorno bueno, amigable y agradable.

Crítica sin validar
Muy floja.
7 de Noviembre de 2014
de usuarios han encontrado esta crítica útil
Antes de nada, me sorprende comprobar que esta película que obtiene un suspenso categórico con un pobre 4,6 de media tenga el 5 y el 6 como las votaciones más recibidas. Una vez después hecha esta curiosa observación, he de decir que he encontrado una decepción dónde no la esperaba hallar, pues la unión de temas tan jugosos como el franquismo, la enseñanza y la sociedad me la esperaba mucho más candente. El referente dentro de este ámbito es para mí la excelente sorpresa "Un Franco, catorce pesetas", y me sorprende mucho lo lejos que se queda de ella en todos los aspectos esta. Lo único bueno, junto a una vaga representación del panorama general de la época, es la impecable actuación de Fernando Guillén Cuervo, que en paz descanse, qué gran actor nos ha dejado. Por lo demás, una monótona narración de acontecimientos sin fuelle alguno, ni visión periférica tras la cámara, ni ideas sustanciales adonde poder llevar el rumbo del largometraje. Poca originalidad a la hora de gestionar la línea argumental. Tildarla de rutinaria sería incluso excederse. Se trata de una crónica plana sin demasiada emoción, y bien es verdad, con algunos detalles logrados, y que se puede ver, pero yo me esperaba una cosa mucho mejor.

Ahora que ya sé quien es Joe Pesci... (Crítica inacabada de 'Solo en Casa 2', (EE.UU. 1992)

Obviamente, vi por primera vez esta película de pequeño, con ocho años o incluso siete. A pesar de un más que probable paso en falso, haciendo ahora un poco de memoria puedo decir incluso que creo que incluso es superior a la primera. (...) La estructura de es un tanto diferente a la de su predecesora, dos años más longeva, y es que, a diferencia de lo que pudimos ver en la primera, un amplio proceso de selección de la casa por parte de los dos ladrones, así como un extenso y quizás, demasiado minucioso seguimiento del avance de los acontecimientos, lo cual podría dar lugar al aburrimiento por parte de algún sector del público más impaciente, aquí la acción sucede de un modo más precipitado, lo cual por mi parte es de agradecer. A la primera la di un siete me parece, un punto menos que a esta. No sería prudente olvidar de que se trata de un inocente ejemplo de película familiar, y por tanto dirigir hacia la cual quejas respecto de lo parecido del guión u otros achaques demasiado exigentes sería pecar de excesivo inoportunismo, pues mientras que la película cumpla con su cometido, el de entretener salvajemente, todo está hecho y no hay nada que se pueda reprochar. Y en este caso, ese objetivo se cumple, y con creces. Lo digo, porque si no recuerdo mal, la primera parte supera holgadamente el seis, mientras que esta se tiene que conformar con un endeble aprobado, cuando se trata de películas exactamente iguales. Es más, a mí, personalmente no me pareció en ningún momento que alguno de los episodios de esta gran secuela estuviese forzado o simplemente fuese inoportuno, yo lo he visto todo con buenos ojos, no he puesto en ningún momento en duda la falta de credibilidad ni me ha parecido que hubiese sobreactuación o falta de rigor en alguno de los instantes.

Crítica sin validar
El Gran Juego.
11 de Noviembre de 2014 0 de 0 usuarios han encontrado esta crítica útil
Ojo, aviso muy importante, no desechar, que hay una bomba de relojería detrás de ese cartel, (que joder, ¡qué cartel!) en el que vemos a un Samuel L. Jackson con un aspecto muy amenazador. Apariencia intimidatoria que luego en la película escondería incluso algo mucho más mayor que eso.

Pero para descubrir el atractivo que se esconde detrás de dicho producto, al que tú le quieres dar un voto de confianza, pero con esas críticas, con esos votos y esas características generales (canadiense, año 2014, ya tan pronto en TV) no te termina de convencer del todo, hay que arriesgarse y ponerse a verla. Os voy a sincero, no comencé el visualizado demasiado confiado y no podía dejar de centrarme en los múltiples defectos que le iba viendo al filme. El momento del atropello. Os juro que me dio risa. Un guiñapo de carne muerta es forzadamente precipitado contra el lateral del coche, de tal manera que el bueno de Cooper ni yendo con cuatro Red Bulls encima, podría evitar la dicha colisión. Un espanto de escena. No obstante el ritmo narrativo que va presentando la película, es moderado en todos los aspectos, cosa que incluso es de agradecer, me quedo viéndola. Los acontecimientos acaecen sin brillar, pero de una manera admisible, teniendo en cuenta el nivel de calidad que uno le presupone a un producto de similares características. Pero luego veo una bandera de EEUU en medio de una producción que es supuestamente canadiense, y me vuelven a entrar ganas de nuevo de tirarme a la yugular de esta película, que no es nada del otro mundo, pero te la estás viendo, ya han pasado 15 minutos y en efecto, es estimable, incluso disfrutas con algunos detalles, hábilmente introducidos por los responsables, la cosa va pintando mejor.

Pero el momento definitivo llega en cuando te enseñan quién es la víctima a quién quieren cargarle el muerto y ahí le ves, un Samuel L. Jackson luciendo con todo el esplendor su figura, haciendo acto de presencia, en forma de un triste sospechoso que al parecer va a tener que enfrentarse a su desafortunado destino. Y luego ves la frivolidad con la que se le ordena a Dominic ajusticiarle, cuando en efecto, no había ninguna señal que evidenciase su culpabilidad. No obstante este decide actuar acorde a lo que le dice su moral, o más bien, su sentido común y se ingenia para lograr un resultado que es el que considera más justo. Los espectadores estamos de acuerdo. A todo eso hay que añadirle, que la evolución del metraje es especialmente disfrutable, por el correcto trato que se le sigue dando en todo momento al guión, sin lagunas, y sabiendo introducir detalles bastante precisos que influyen sobre la psicología del espectador, algo muy considerable teniendo en cuenta lo que en principio tenemos delante, como ya había puntualizado antes.
spoiler
Pero todo cambia cuando se da cuenta de que Samuel en efecto, es culpable de todo y de muchas cosas más, y que se dedica a exterminar personajes marginados, ex-convictos que considera inadaptados y que según su criterio son un peligro para la ciudad, pues existe una gran probabilidad de riesgo de que aniquilen familias, que es lo que le había pasado a él.
Me Creo Rambo

Esta bien, tiene su interés, pero tampoco me ha maravillado excesivamente. Decae en algunos momentos, pero eso sí, se puede ver. Una vez visto el final, el conjunto resulta interesante. Estuve a punto de ir a verla al cine, cuando se estrenó hace ocho años, pero los mayores que estuvieron conmigo, dijeron que mejor... no. Y ahora entiendo por qué no es recomendada para menores de 18 años, pues lo que parecía ser un inocente cuento de hadas con un toque ligeramente oscurecido (tal y como deja entrever el cartel) es en realidad una angustiosa historia de violencia y de crueldad situada en la terrible España de Franco de los años 40. Esos bonitos parajes boscosos que albergan a los luchadores contra el pérfido régimen dictatorial franquista son el campo de tiro del despiadado general franquista, un insensible asesino a sangre fría que no duda en hacer uso de la violencia en todo momento, para mantener a buen feudo su infranqueable orgullo. Sublime inter

No creo que llegue a comprender los motivos exactos por los cuáles críticos de diversos medios se dedican a poner por los cielos esta película, pero el caso es que yo mi impresión la tengo muy clara y nadie la va a conseguir cambiar.

La película emplea una forma de narrar precipitada, pero muy precisa, pretendiendo dárselas de lo que no es, una obra grandilocuente, brillante y épica, todo un acontecimiento. Lo cierto es que el director ha estado inteligente a la hora de escoger el tema a tratar en la cinta, pues se trata de una constante en la sociedad actual que no va a pasar desapercibida y que no parece que vaya a dejar de estar de moda en ningún momento, que se resume en el título, la red social. Lo más curioso es que precisamente esa es la técnica narrativa que emplea mi director favorito, Martin Scorsese, que ha dirigido las que hasta ahora y, seguramente por siempre, serán dos de mis películas favoritas por excelencia, 'Infiltrados' (2006) y la reciente 'El Lobo de Wall Street' (2013). Pero si bien en estos casos esa manera de entrelazar los acontecimientos, tan pedante y arrolladora, no es que simplemente me parece la más adecuada, sino que me encanta, me maravilla, me vuelve loco, aquí no puede hacer otra cosa que incentivar mi denostación hacia la obra en cuestión, porque extrae un recurso propio de lo que me gusta mucho, para contar algo que es una nimiedad tan exagerada que llega a formar una película entera. Lo que coinciden en aplaudir sus acérrimos amantes es que trata un tema a través de lo que denominan, 'una moraleja fascinante', la duda de si de veras vale la pena tener 500.000.000 de amigos a cambio de tan solo unos pocos enemigos. A partir de ahí 'se extrae majestuosamente' la cuestión moral y psicológica de

No os dejéis engañar por su aparente encanto.

Me satisface comprobar que por dónde aún parece continuar fluyendo el riego de la inteligencia y de la sensatez sea una parte del cuerpo llamada CEREBRO y no esa que Demi Moore le ha devorado al pobre de 'Miky' hasta arrancársela de cuajo. Lo cual en estos tiempos que corren viene a ser una rareza... Me refiero a lo que arroja la media de la película.

La premisa que se nos presenta es muy elemental, y por tanto no encaja en proporción con el tiempo que se emplea para discurrir acerca de ella. Más de dos horas para contar itinerario de un culebrón. No pega, ¿verdad que no?

No cumple las expectativas.

Tras la materialización de lo que es un comienzo oportuno, la película enseguida deja claras varias realidades; que su naturaleza televisiva, lleva inherente la ausencia de cualquier detalle que se pueda asociar con la calidad y con un desarrollo interesante, -es algo que se concluye por la más simple de las correlaciónes. (...) Una auténtica lástima, pues la idea es más que decente, y podía lugar a un auténtica película con mayúsculas, memorable por sus tristes y profundos gestos, y por sus sombríos parajes capaces de evadir al espectador a una atmósfera que cree una sensación de extraño aislamiento y evasión, pero a la vez generando suma simpatía. Una película memorable.

Sin embargo nada más lejos que eso. (...) Lo que tenemos aquí es casi una antítesis de ese comienzo franco y frío, sostenido recipiente de calidad, que sorprende por la constante reiteración de torpeza que presenta a cada paso, que tratándose de una película así, a priori tan cautivadora, resulta abrumador y desconcertante.

Interesante... Y a su manera buena. A mí me ha convencido por presentar unos índices de originalidad realmente inesperados para lo que es el argumento, en principio bastante trivial y sin demasiada tela que cortar, pero no, no deja de sorprender al espectador a lo largo de la película. Siendo sinceros, yo me esperaba una cosa un pelín diferente; -y creo que todos también, pues un fantasma o una presencia no corporea es lo más inmediato que se le venía a uno a la cabeza, o en su defecto, algún pervertido demasiado tarado- pero no, nos la meten doblada, pues nadie se esperaba los senderos por los que transcurriría finalmente. (...) Es mejorable en muchos aspectos, o al menos yo desarrollaría el avance del guión de una manera diferente, quizás de un poco más divertida, quedando una vez claro que la película no pretende crear terror real, sino que se mueve más por los caminos de la intriga psicológica. Seré yo que estaré zumbado, pero en caso de notar que alguien está jugando conmigo en mi propia casa, siendo esta más grande de lo normal, sería yo el que colocase una especie de 'trampas' que obligasen a evidenciarse al invasor tarde o temprano. Desde luego que es algo muy psicológico... Pero el caso es que todo depende del papel que tú decidas asumir.

Simplemente espantosa.
No estoy al tanto de la versión 'uncut', que circula en algunos comentarios, que me imagino al ser íntegra con la violencia y el gore, será algo más llevadera, pero yo voy a hablar de lo que he visto y que os puedo asegurar de que es un verdadero espanto. Insisto en que una versión sin censura (pues porque hay algunas películas de terror, de los 80 y 90 sobre todo, algunos slashers que son producciones sin demasiada ambición, secuelas de las sagas Viernes 13 y al estilo, cuyas escenas gore más escabrosas se quedan en la mesa de montaje y nunca ven luz). ¿Por qué os preguntaréis? Pues porque como casi siempre los demás deciden por nosotros qué ver. Porque a algún estúpido conservador, en un ademán restrictivo más, se le ha ocurrido un buen día que no estaría demás censurar películas, porque es lo que le parece bien a él y a su estúpida moral.

Hay un caso reciente, el de SAW VI, que fue cortado durante tres minutos en las proyecciones porque al gobierno, supuestamente socialista, no le parecía adecuado. Pues cosas así.

Por fortuna eso ya no suele pasar, pero bien largos son los brazos de la censura, pues si os dais cuenta, la tendencia predominante en las películas de terror de los últimos años sugiere un claro ablandamiento respecto a lo que se veía hasta hace unos años. Estoy hablando de épocas temporales muy cortas, nada generacional.

Vale, dejando de lado este tema, la película es horrorosa, en todos los sentidos, y que incluso agarrándose a su supuesta brutalidad original ganaría mucho. La actitud de los personajes, seres despreciables, frívolos y gilipollas todos ya lo marca casi todo, pues son los que abarcan la casi total duración del metraje. Poco puedo decir de su actitud que no sea difícil de imaginar, pues una vez hecha la descripción... no es difícil de suponer como se comportan. Y es que resulta de lo más insoportable. La película entera es como una eterna agonía en la que esperas a cuando va a llegar el desequilibrado ese y mate por lo menos a dos de un tirón. Y se hace larga y pesada. Y mucho. Y NO ENTRETIENE! Y cuando por fin llegan las escenas de 'la exterminación premeditada', estas no son lo suficientemente satisfactorias por lo que siempre estamos en las mismas.

A ver la ambientación está bien, pero tratándose de una película de los ochenta, pues nada te va a impresionar demasiado a nivel estético. Por lo que el talento mostrado en una película es lo que perdura. Bien lo supo (y lo hizo) Brian de Palma cinco años antes con 'Carrie'. Por muchas películas de terror contemporáneas que hayas visto, esto uno, te impacta y te horroriza, y dos, está majestuosamente realizada.

Esto ha sufrido daños a la hora de llegar hasta nosotros su realización, que algunos dicen que es maravillosa, pero del otro aspecto... anda cortita. No le puedo poner más nota porque juzgo lo que he visto (pero a la vez tampoco puedo decir que la película no lo he visto) y aunque algún día me de algún día el venazo de 'contemplarla' en su versión íntegra en V.O. (con subtítulos al castellano, pues solo está disponible en inglés), al siguiente instante me retractaré de mi decisión al recordar lo horrible que me ha parecido eso que he visualizado y que pretendo volver a ver.

Esta película no tiene más misterio, un padre maltrata a un chaval, sí sí, ese que sale en el cartel. Tenemos la base del asunto, tenemos la silueta de un barrio obrero con sus detalles y miserias como fondo; explicación natural por la cual el animal social se mimetiza con el entorno, tenemos secundarios que son el entorno del protagonista, tenemos el mensaje, a mi gusto una prosaica reivindicación que practicamente te deja indiferente, pues en lo único que te fijas y lo que te impacta es la realidad de las escenas del presente; no piensas en el futuro. Pero falta algo: Los motivos. Sí, es algo fundamental y más aún cuando la película tampoco tiene nada más interesante que contar más allá de esa realidad que ya todos conocemos. No obstante el director ha preferido realizar su largometraje enfocando al mundo social de los preadolescentes de la época del dicho barrio obrero, siempre desde la visión de un contemplativo adulto, eso sí. Una elección que no se puede considerar desafortunada, pero a nivel personal me sorprende que se hayan obviado cuestiones tan naturales y evidentes como el móvil del dicho trato vejatorio por parte de un hombre en apariencia tranquilo e incluso educado, y del cual no se tienen registros de desequilibrio mental o grado de locura alguno.

Crítica inacabada de 'Hervidero' (1992)

OS VOY A CONTAR UNA COSA. Llegué a casa el día 1 DE ENERO, a altas horas de la madrugada. ¿Qué estaba haciendo en la calle a esa hora y ese día, os preguntaréis? La respuesta es obvia, amigos. Tirar petardos. Pero dicha actividad no puede catalogarse simplemente con eso, con una calificación tan trivial. Porque fuimos a una guerra que en cierto modo fue premeditada. Fueron dos horas y media de pura batalla campal, sin principios ni preámbulos exagerados, las que pase enchufándome con mis amigos con toda clase de petardos y esquivando los destellos de las luces de los fuegos artificiales que con bastante poca responsabilidad y prudencia hacíamos volar por los suelos. Y tras esa intensa y extensa en tiempo, actividad lúdica, en la que he tenido varias veces que tirarme al suelo pero a lo bestia, esquivando fogonazos de colores que despedían las candelas (nosotros lo llamamos DUELO DE VARITAS, y de hecho sí, la escena recordaba a un intenso y multidudinario intercambio de HECHIZOS de la franquicia del mago más famoso, "Harry Potter") y los fuegos artificiales, -que siempre procuraban una dirección de vuelo imprevisible- y que rebotaban por todas partes, incluído en las terrazas de los no muy entusiasmados habitantes de las dichas viviendas, cogiendo petardos del suelo a punto de estallar para devolvérsela al emisor (cual una granada, sí sí, tanto en explosión como en dimensión), así como manipular toda una serie de tracas y voladores, siempre de manera un pelín malintencionada, llego a casa, cansado después de la dura batalla, abro el refrigerador en busca de alimento, y cual guerrero cansado, me dejo caer sobre el cascado sofá que recibió, nuevamente, con estrépito mis 58 kilos de peso caídos de golpe. Lo siguiente que hago es coger el mando de la tele, lo enciendo... Y BINGO! ¿CON QUÉ ES LO QUE ME ENCUENTRO?? Con una película de acc Esto sí que es cine de acción.

Las cosas como son ^^ xD

Para empezar: ¿pero qué coño me habeis puesto aquí?? Joder, Mark me cae de puta madre, sus pelis me gustan, pero es que esto que cojones es?!? Macho, ni peleas ni historias ni hostias, no le he visto ningún sentido, Bale no sé que papel hace, parece estar zumbado o algo así, muy nervioso, se mueve mucho, y mientras tanto las 7 hermanas menopáusicas dando por culo sin parar con sus afilados picos y sus punzantes lenguas. Todo un guirigai... Wahlberg va y viene de acá para allá sin saber dónde meterse y no sé... Joder que puto coñazo, no puede ser tan tan aburrida... No sé si me habré perdido lo mejor, pero a los 45 minutos o por ahí, me dije: "Eah, a tomar por culo". Cambié a Una Historia de Violencia, y me estaba gustando, como mínimo la encontraba interesante, útil, pero ya estaba muy mermado por el sueño que me entró a ver The Fighter y me dormí... ¿Lo comprendeis? Esta película me ha causado sueño y he hecho que me quedara frito viendo otra, que estaba encontrando interesante. ¡Esto no es normal! Por lo general, siempre, bueno, casi siempre me acabo una película si comienzo a verla, pero es que esta!!! No he podido! Tan tediosa la encontraba. Y es que veo que en FA apenas hay una crítica mala acerca de The Fighter... Solo dos de **** (Regular) y tan solo UNA de ** (Mala).

Y eso que la historia parece interesante: un luchador simpático, con ganas de salir adelante, que lo intenta, es bueno, tiene tácticas, pero que siempre acaba perdiendo por poco. Será la puesta en escena, la ambientación, el modo de plantear la situación, pero es que lo que estaba viendo no me estaba gustando nada de nada, no lo entiendo...

Un detalle más, tengo con un 10 (**********); Excelente) a "El Luchador" de Aronofsky, una película de mayor complicación a la aceptación general, sin embargo ya veis, me ha encantado. Todavía me estoy currando una crítica guapa que pueda equiparable a su calidad...

Definitivamente, o no la habré entendido bien, para poder disfrutarla, o es que no confío lo suficiente en mi criterio, que rara vez me decepciona al no plantarle un uno a esta película.