Foro Ángel o demonio
Te amare más allá del fin de los tiempos-3º temporada
#0
19/07/2011 03:55
Te amare más allá del fin de los tiempos - Capitulo 1
Frases inconexas de un cuento inacabado, podía sentir todavía el palpitar de su corazón tan cerca del suyo, su amado ser, su alma todo en un conjunto de esferas infinitas, hubo una despedida tan corta y desesperante como el más mínimo de los segundo, quería volar quería sentir de nuevo sus manos en las suyas, sus labios en los suyos, todo su ser, la cercanía, la lejanía, su nombre sonaba de una manera celestial en sus labios, tantos años preguntando, a cada minuto preguntando:
-Natael algún día volveré a verle. –su respuesta confusa. -tu tendrás que seguir tu propio camino.-sabia que no podía, pero siempre hacia lo mismo cogía el libro lo apretaba con fuerza contra su pecho mientras sentía de nuevo el palpitar de su corazón, no se podía volver en el tiempo pero ella volvía todas las noches al pasado aquella ultima noche, que estuvieron juntos escuchaba una y mil veces la misma frase:
-Te amare más allá del fin de los tiempos. –luego sintió de nuevo sus besos, sus labios en los suyos, aquel abrazo de despedida, no habían querido soltarse, deseaban de nuevo volar juntos, si querían de nuevo volar, sus alas en el viento, su pelo moviéndose por el movimiento, pero entonces sintió como una fuerza tiraba de ella para abajo, el propio Natael fue a buscarla enfadado, jamás se lo había perdonado, ella no quería volver quería estar para siempre con su amado, ser una luz, ser un alma blanca, ahora volvió abrazar el libro, volviendo de nuevo a la realidad, aquella realidad que dolía cada vez más, no quería la eternidad sin sus besos, si muchas veces pensaba que hubiera pasado si ella se hubiera ido al lado oscuro, como una vez le dijo Alexia, podría haber disfrutado para siempre del ser amado, las lágrimas caían por sus mejillas quiso morir ahora de nuevo, abrió de nuevo el libro, para ver a su familia, miro a Santi ahora mismo era un reputado abogado, su hermana pequeña a la que sus padres pusieron Nehira, ya que ella tubo que marcharse y dejarlos, ahora era una muchacha muy guapa como ella, tenia sus mismos ojos, y su pelo era de un color miel intenso, pero era bastante complicada tenia un carácter muy parecido al de ella, varias veces habían intentando tentarla el mal, pero siempre había estado ella para salvarla una y otra vez. Ahora acaricio su imagen en el libro mientras escucho una voz por detrás de la morada.
-Valeria. –ella se volvió y le miro la verdad que siempre le agradecería todo lo que había hecho por ella cuando, la había vuelto para atrás en el tiempo, había quitado de que hubiera hecho eso tan terrible a sus padres, pero no le perdonaría jamás, que la hubiera separado de él, prefería mil veces ser una luz que una eternidad sin su amor.
-Natael. –le dijo ella de mala gana mientras se levantaba dubitativa del suelo cerrando el libro.
-Tienes un alma que salvar. –Valeria puso la cara que ponía siempre de pura indiferencia, hacia mucho tiempo que aquel trabajo, la sobraba. Más de diecisiete años siendo un Ángel triste. Lo que nunca había querido ser, lejos de lo único que quería, allí estaba en el libro sólo en las noches dónde las estrellas brillaban de nuevo de una manera especial podía volver en el tiempo a verle. –Valeria me escuchas. –hizo un gesto de desesperación de nuevo muy típico de él, ella miro para otro lado mientras le quitaba de nuevo el libro a ella. –En este libro, en cada párrafo, esta Damián en él. –ella le quito el libro enfadada.
-Estará ahí siempre, como esta en mi corazón. –dijo mientras los ojos se volvían de nuevo un mal de lágrimas. –Ahora que quieres, desearía muchísimo que un día me clavaran la espada, o me mandaran al cielo para volver a estar con él.
-No digas eso muchas almas te necesitan aquí. –ella le miro a los ojos y por fin lo dijo deseaba tanto decírselo.
-Claro el deber primero no, como hiciste con Alexia. –él se fue muy enfadado al momento apareció, Gabriel que se acerco a ella para enseñarle su misión. Las dos miraron la pantalla, Iris como no estaba malmetiendo a una mujer para que matara a su pequeño recién nacido, la miro con odio, como odiaba a Iris. Cuanto le gustaría clavarle la espada, a esa bruja, si no piense eso pensó Valeria, tú eres una Ángel y debes amar a todos, ella acepto su misión y se fue.
Frases inconexas de un cuento inacabado, podía sentir todavía el palpitar de su corazón tan cerca del suyo, su amado ser, su alma todo en un conjunto de esferas infinitas, hubo una despedida tan corta y desesperante como el más mínimo de los segundo, quería volar quería sentir de nuevo sus manos en las suyas, sus labios en los suyos, todo su ser, la cercanía, la lejanía, su nombre sonaba de una manera celestial en sus labios, tantos años preguntando, a cada minuto preguntando:
-Natael algún día volveré a verle. –su respuesta confusa. -tu tendrás que seguir tu propio camino.-sabia que no podía, pero siempre hacia lo mismo cogía el libro lo apretaba con fuerza contra su pecho mientras sentía de nuevo el palpitar de su corazón, no se podía volver en el tiempo pero ella volvía todas las noches al pasado aquella ultima noche, que estuvieron juntos escuchaba una y mil veces la misma frase:
-Te amare más allá del fin de los tiempos. –luego sintió de nuevo sus besos, sus labios en los suyos, aquel abrazo de despedida, no habían querido soltarse, deseaban de nuevo volar juntos, si querían de nuevo volar, sus alas en el viento, su pelo moviéndose por el movimiento, pero entonces sintió como una fuerza tiraba de ella para abajo, el propio Natael fue a buscarla enfadado, jamás se lo había perdonado, ella no quería volver quería estar para siempre con su amado, ser una luz, ser un alma blanca, ahora volvió abrazar el libro, volviendo de nuevo a la realidad, aquella realidad que dolía cada vez más, no quería la eternidad sin sus besos, si muchas veces pensaba que hubiera pasado si ella se hubiera ido al lado oscuro, como una vez le dijo Alexia, podría haber disfrutado para siempre del ser amado, las lágrimas caían por sus mejillas quiso morir ahora de nuevo, abrió de nuevo el libro, para ver a su familia, miro a Santi ahora mismo era un reputado abogado, su hermana pequeña a la que sus padres pusieron Nehira, ya que ella tubo que marcharse y dejarlos, ahora era una muchacha muy guapa como ella, tenia sus mismos ojos, y su pelo era de un color miel intenso, pero era bastante complicada tenia un carácter muy parecido al de ella, varias veces habían intentando tentarla el mal, pero siempre había estado ella para salvarla una y otra vez. Ahora acaricio su imagen en el libro mientras escucho una voz por detrás de la morada.
-Valeria. –ella se volvió y le miro la verdad que siempre le agradecería todo lo que había hecho por ella cuando, la había vuelto para atrás en el tiempo, había quitado de que hubiera hecho eso tan terrible a sus padres, pero no le perdonaría jamás, que la hubiera separado de él, prefería mil veces ser una luz que una eternidad sin su amor.
-Natael. –le dijo ella de mala gana mientras se levantaba dubitativa del suelo cerrando el libro.
-Tienes un alma que salvar. –Valeria puso la cara que ponía siempre de pura indiferencia, hacia mucho tiempo que aquel trabajo, la sobraba. Más de diecisiete años siendo un Ángel triste. Lo que nunca había querido ser, lejos de lo único que quería, allí estaba en el libro sólo en las noches dónde las estrellas brillaban de nuevo de una manera especial podía volver en el tiempo a verle. –Valeria me escuchas. –hizo un gesto de desesperación de nuevo muy típico de él, ella miro para otro lado mientras le quitaba de nuevo el libro a ella. –En este libro, en cada párrafo, esta Damián en él. –ella le quito el libro enfadada.
-Estará ahí siempre, como esta en mi corazón. –dijo mientras los ojos se volvían de nuevo un mal de lágrimas. –Ahora que quieres, desearía muchísimo que un día me clavaran la espada, o me mandaran al cielo para volver a estar con él.
-No digas eso muchas almas te necesitan aquí. –ella le miro a los ojos y por fin lo dijo deseaba tanto decírselo.
-Claro el deber primero no, como hiciste con Alexia. –él se fue muy enfadado al momento apareció, Gabriel que se acerco a ella para enseñarle su misión. Las dos miraron la pantalla, Iris como no estaba malmetiendo a una mujer para que matara a su pequeño recién nacido, la miro con odio, como odiaba a Iris. Cuanto le gustaría clavarle la espada, a esa bruja, si no piense eso pensó Valeria, tú eres una Ángel y debes amar a todos, ella acepto su misión y se fue.
#101
28/11/2011 18:27
Iris? Que fuerte! , no me lo esperaba... Me encanta
#102
04/12/2011 23:40
Capitulo 15 una fiesta salvaje
Ángel miraba de una lado a otro muchas chicas había bastante atractivas en esa fiesta, pero se acerco a él Iris, caminando como si le fuera a seducir, pero para él le era en el fondo bastante indiferente, se acerco a él mientras, le tiraba un poco de la camisa y se magreaba con su cuerpo, mientras él permanecía impasible a su provocación.
-Estoy un poquito cansado y creo que me voy a ir. –ella le miro y como si estuviera a punto de tener un orgasmo contesto moviendo de nuevo las caderas pensando que era sexy pero en el fondo, ya aburría, y a él más aun.
-tu no vas a ir a ningún lado estúpido, tienes la misión de acostarte con esa estúpida, hacerla una de nosotros, crees que serás capaz.- le dio con la rodilla en la parte baja, él se echo un poco para atrás la empujo enfurecido, que ira le producía esta tía. –Alexia la vio entrar a ella que se acerco a Silvia y la abrazo de repente iris se recato en su manera de caminar, se dispuso a poner las manos en los hombros a su amiga.
-Que guapa has venido. –pero para sus adentro la odiaba con toda su alma era la fusión de su ex amante, Valeria a la que odiaba con todas sus fuerzas. –Por cierto has visto cuanto chico guapo ahí aquí. Ella miro a todos los lados de la sala hasta que sus ojos se toparon con los suyos de nuevo aquel chico que siempre había conocido en extrañas circunstancias, la miraba de una manera arrebatadora, de repente dos peleaban y ella cambio la mirada, la pelea era muy fuerte se estaban pegando tirando sillas y mesas, los únicos que se acercaron para separarlos fueron Ángel y ella, Alexia sonreía mirando la escena, Iris también el caos, todo eso les hacia sentirse poderosas, superiores. Ángel cogió uno de ellos pero a Nehira medio la empujo, tenia tal violencia, e ira en sus ojos, pero de repente y sin nadie entenderlo ella le abrazo y la violencia que el chico sentía se aplaco, todo fue como si a su alrededor se pusiera blanco, sólo Alexia e Iris podían verlo, pero Ángel miraba la escena atónito como ella había aplacado su ira. Ella se volvió y por primera vez los dos se quedaron quietos, ya se habían encontrado otras veces cuando la atropello en el hospital, cuando la salvo de la piscina, él la miro por primera vez bien, bajo su mirada por su cuerpo, como si fuera algo que ver, observo sus caderas estrechas pero curvilíneas, no era excesivamente alta, pero lo suficiente para quedar a la altura de su expectativas, su vestido realzaba sus hombros bastantes bonitos y torneados por los largos de la piscina, decían que los hombres se fijaban en dos cosas, el culo y si tenia una par de buenas razones para mirar, a él esas razones le parecieron excesivamente planas, pero si que es verdad que por eso ese vestido cerrado por delante y con la espalda al descubierto, sin apenas nada debajo sólo lo podía llevar alguien con ese tallaje, ella se volvió un poco tímida por su mirada arrebatadora, él pudo mirar la parte que mas miraban los tíos, aquí ella estaba bien servida con lo que dirían los tíos, un buen culo, además el vestido realzaba una espalda verdaderamente perfecta, de repente a él no le pareció tan indiferente, Nera, era, como se llamaba pensó él.
Ella le miraba pensativa si me he dado cuenta, pensó me ha mirado el culo, si lo ha hecho, descarado, ahora ella fue la que le miro a él, si por una vez en su vida no se iba a dejar achantar, le miro fríamente, tenia un cuerpo torneado haría algún tipo de deporte que torneara sus brazos, eran musculosos pero la verdad no demasiado, seguramente debajo de esa camisa gris, no había ninguna estupenda tableta de chocolate de esas que eran un pecado mirar, mas bien era tirando a flaco, bajo un poco la mirada, le estaba mirando el paquete ella desvió los ojos ahora, eso no era lo correcto pensó Nehira, pero no lo pudo remediar, no había casi nada en esos pantalones, hay no marcaba nada interesante, un cinco raspado, aparte que casi la mata, este silencio entre los dos había que romperlo, pero como pensó ella y que tenia con su amiga, quería saberlo. Iris llego bailando y de repente le dio la espalda a él, pero se acerco dándole con el culo y bailando insinuante mientras sonreía a su amiga que desvió la mirada, ahora se acerco a ella y tiro de su mano para bailar con ella, ella la siguió bailando un poco.
-Mirabas a Ángel. –le dijo sonriendo malévolamente. –te apetece.
-¿Cómo? –le dijo ella mirándola. –No es tu amigo especial.
-Le podemos compartir. –le dijo poniendo cara viciosilla.
-Es broma. –le dijo ella parando de bailar.
-Claro. –le dijo ella sonriendo ahora tiro de su mano dónde estaba Ángel le abrazo mirándola a ella. –creo que os conocéis pero que tal si os presento.
-Ángel esta es Nehira. –él levanto la mano para chocar la de ella ni un beso ni nada que les acercara, mas de lo necesario.
-nos conocemos en extrañas circunstancias, pero nos conocemos. –le dijo echando una pequeña sonrisa, Alexia le hizo una señal a Iris que se fue a dónde estaba ella y dejo a la pareja sola.
-Bastante casualidad que cada vez que mi vida esta en peligro tu estés en ella, no te parece. –él la miro que niñata mas insoportable pensó.
-Pues no te pongas en peligro, mira mejor quédate en tu casa. –ella le miro, ahora.
-Tu de que vas, poniéndote borde conmigo te recuerdo que casi me atropellas. –Alexia miraba la escena desde el otro lado de la sala, esto iba muy mal.
-Ne. –le dijo con desprecio. –o como te llames, no tengo tiempo de escuchar niñatas de institutos. –se marcho dejándola con una cara tonta. Alexia golpeo una puerta que había al lado y se fue detrás de él.
Ángel miraba de una lado a otro muchas chicas había bastante atractivas en esa fiesta, pero se acerco a él Iris, caminando como si le fuera a seducir, pero para él le era en el fondo bastante indiferente, se acerco a él mientras, le tiraba un poco de la camisa y se magreaba con su cuerpo, mientras él permanecía impasible a su provocación.
-Estoy un poquito cansado y creo que me voy a ir. –ella le miro y como si estuviera a punto de tener un orgasmo contesto moviendo de nuevo las caderas pensando que era sexy pero en el fondo, ya aburría, y a él más aun.
-tu no vas a ir a ningún lado estúpido, tienes la misión de acostarte con esa estúpida, hacerla una de nosotros, crees que serás capaz.- le dio con la rodilla en la parte baja, él se echo un poco para atrás la empujo enfurecido, que ira le producía esta tía. –Alexia la vio entrar a ella que se acerco a Silvia y la abrazo de repente iris se recato en su manera de caminar, se dispuso a poner las manos en los hombros a su amiga.
-Que guapa has venido. –pero para sus adentro la odiaba con toda su alma era la fusión de su ex amante, Valeria a la que odiaba con todas sus fuerzas. –Por cierto has visto cuanto chico guapo ahí aquí. Ella miro a todos los lados de la sala hasta que sus ojos se toparon con los suyos de nuevo aquel chico que siempre había conocido en extrañas circunstancias, la miraba de una manera arrebatadora, de repente dos peleaban y ella cambio la mirada, la pelea era muy fuerte se estaban pegando tirando sillas y mesas, los únicos que se acercaron para separarlos fueron Ángel y ella, Alexia sonreía mirando la escena, Iris también el caos, todo eso les hacia sentirse poderosas, superiores. Ángel cogió uno de ellos pero a Nehira medio la empujo, tenia tal violencia, e ira en sus ojos, pero de repente y sin nadie entenderlo ella le abrazo y la violencia que el chico sentía se aplaco, todo fue como si a su alrededor se pusiera blanco, sólo Alexia e Iris podían verlo, pero Ángel miraba la escena atónito como ella había aplacado su ira. Ella se volvió y por primera vez los dos se quedaron quietos, ya se habían encontrado otras veces cuando la atropello en el hospital, cuando la salvo de la piscina, él la miro por primera vez bien, bajo su mirada por su cuerpo, como si fuera algo que ver, observo sus caderas estrechas pero curvilíneas, no era excesivamente alta, pero lo suficiente para quedar a la altura de su expectativas, su vestido realzaba sus hombros bastantes bonitos y torneados por los largos de la piscina, decían que los hombres se fijaban en dos cosas, el culo y si tenia una par de buenas razones para mirar, a él esas razones le parecieron excesivamente planas, pero si que es verdad que por eso ese vestido cerrado por delante y con la espalda al descubierto, sin apenas nada debajo sólo lo podía llevar alguien con ese tallaje, ella se volvió un poco tímida por su mirada arrebatadora, él pudo mirar la parte que mas miraban los tíos, aquí ella estaba bien servida con lo que dirían los tíos, un buen culo, además el vestido realzaba una espalda verdaderamente perfecta, de repente a él no le pareció tan indiferente, Nera, era, como se llamaba pensó él.
Ella le miraba pensativa si me he dado cuenta, pensó me ha mirado el culo, si lo ha hecho, descarado, ahora ella fue la que le miro a él, si por una vez en su vida no se iba a dejar achantar, le miro fríamente, tenia un cuerpo torneado haría algún tipo de deporte que torneara sus brazos, eran musculosos pero la verdad no demasiado, seguramente debajo de esa camisa gris, no había ninguna estupenda tableta de chocolate de esas que eran un pecado mirar, mas bien era tirando a flaco, bajo un poco la mirada, le estaba mirando el paquete ella desvió los ojos ahora, eso no era lo correcto pensó Nehira, pero no lo pudo remediar, no había casi nada en esos pantalones, hay no marcaba nada interesante, un cinco raspado, aparte que casi la mata, este silencio entre los dos había que romperlo, pero como pensó ella y que tenia con su amiga, quería saberlo. Iris llego bailando y de repente le dio la espalda a él, pero se acerco dándole con el culo y bailando insinuante mientras sonreía a su amiga que desvió la mirada, ahora se acerco a ella y tiro de su mano para bailar con ella, ella la siguió bailando un poco.
-Mirabas a Ángel. –le dijo sonriendo malévolamente. –te apetece.
-¿Cómo? –le dijo ella mirándola. –No es tu amigo especial.
-Le podemos compartir. –le dijo poniendo cara viciosilla.
-Es broma. –le dijo ella parando de bailar.
-Claro. –le dijo ella sonriendo ahora tiro de su mano dónde estaba Ángel le abrazo mirándola a ella. –creo que os conocéis pero que tal si os presento.
-Ángel esta es Nehira. –él levanto la mano para chocar la de ella ni un beso ni nada que les acercara, mas de lo necesario.
-nos conocemos en extrañas circunstancias, pero nos conocemos. –le dijo echando una pequeña sonrisa, Alexia le hizo una señal a Iris que se fue a dónde estaba ella y dejo a la pareja sola.
-Bastante casualidad que cada vez que mi vida esta en peligro tu estés en ella, no te parece. –él la miro que niñata mas insoportable pensó.
-Pues no te pongas en peligro, mira mejor quédate en tu casa. –ella le miro, ahora.
-Tu de que vas, poniéndote borde conmigo te recuerdo que casi me atropellas. –Alexia miraba la escena desde el otro lado de la sala, esto iba muy mal.
-Ne. –le dijo con desprecio. –o como te llames, no tengo tiempo de escuchar niñatas de institutos. –se marcho dejándola con una cara tonta. Alexia golpeo una puerta que había al lado y se fue detrás de él.
#103
04/12/2011 23:41
-Tu dónde demonios vas. –él se volvió hacia Alexia se acerco a ella.
-Paso de todo esto, no soporto a esa cría, no la besaría ni aunque se derritieran los polos, no me gusta no es mi estilo, le faltan curvas. –ella le miro y puso una cara maléfica.
-tu todavía no has entendido verdad. –le cogió del pelo ahora. –tu harás todo lo que yo te diga, sin rechistar, me da igual si te gusta o no esa chica, yo la quiero y tu me la darás, no te he pedido, ni te he preguntado, si te gusta, ni te he pedido que te enamores de ella, quiero simplemente que la hagas de nosotros, ya. –él hizo con la cara que si. –lo has entendido espero no tener que repetirlo, ahora entraras ahí, utilizaras tu armas para ser muy amable con ella, creo que es bastante sencillo no crees. –él le afirmo con la cara. Miro a otro lado mientras intentaba respirar de nuevo, se volvió y vio venir a Nehira, sólo le miraba, ahora había recordado su nombre por fin, ella no decía, se acerco a él, muy cerca cada vez más, él la miraba extrañado, si se había puesto de vuelta y media, ahora se acercaba puso un dedo en los labios de él símbolo de silencio, que había tomado en la fiesta pensó él, cuando sus labios se acercaban a los suyos, su respiración, se puso mas fuerte cuando sintió el roce de sus labios en los de él, pero entonces, él la cogió por la cintura y la abrazo fuerte respondiendo su beso con toda la pasión del mundo, los devoraba como si fueran suyos, cerro los ojos sintiendo y cuando los abrió era Alexia y sonreía ahora soltándose.
-Me he dado cuenta que te es muy indiferente. –le dijo con una sonrisa. –Eso si no te enamores, hace muchos años alguien me traiciono, por que se enamoro, tu no te puedes dar ese lujo, espero que esto te quede claro. Sino. –hizo el gesto de cortarle el cuello, eso si con una bella sonrisa, mientras caminada para adentro.
Iris bailaba entre dos chicos de lo más sensual, Nehira miro para otro lado y le vio a él de nuevo entrar en la fiesta, se acerco a ella.
-Siento haber sido un poco borde. –ella le miro ahora.
-También lo siento. –ella volvió a mirar a su amiga que se besaba primero con uno y luego con otro, con los que bailaba. –Creo que esta fiesta no era lo que yo esperaba, creo que me voy a casa. –él le cogió un poco la muñeca a ella, la miro a los ojos.
-Te llevo en mi moto. –levanto la mano ahora. –prometo no correr demasiado, no hacer que corras peligro. –de repente él sonrió y ella le miro de nuevo, pero de otra manera.
-De acuerdo. –le dijo ella. –voy a por una chaqueta que he traído. –él le hizo que de acuerdo. Alexia ahora sonreía contenta, todo salía muy bien.
Ella miro la moto él que tenia el casco la miraba, se lo acerco a ella que se lo coloco, él se subió a la moto, ella se remango un poco el vestido, él la miro ahora se veían unas preciosas piernas que habían pasado desapercibidas para él hasta ahora, se subió en la moto detrás de él, pero se cogió a sus hombros, él la miro ahora.
-No, si te coges así te caerás. –él cogió una de sus manos y la puso en su cintura. Ella bajo la otra y le cogió tímida. –Abrázate fuerte o te caerás. –ella acerco sus manos hasta que estuvo una con la otra, tocaba su estomago, él podía sentir su cuerpo caliente detrás, ahora pensó de repente mientras le daba al acelerador de la moto, que no le disgustaba tanto que ella no tuviera demasiado pecho, lo compensaba con unas piernas preciosas, unos ojos muy seductores, por que si también la había mirado a los ojos pensó mientras arrancaba.
Valeria estaba muy preocupada ahora miraba a Natael.
-Iris esta cerca de ella. –él se abrazo con la gabardina ahora a si mismo miro por la pantallita que veía todo, la miraron en la moto.
-Vaya no veo a Iris por ningún sitio. –ella se acerco y toco la pantalla ahora.
-¿Quien es este chico, que esta con mi hija?
-Ángel… -ella le miro, era un Ángel.
Continuara…
-Paso de todo esto, no soporto a esa cría, no la besaría ni aunque se derritieran los polos, no me gusta no es mi estilo, le faltan curvas. –ella le miro y puso una cara maléfica.
-tu todavía no has entendido verdad. –le cogió del pelo ahora. –tu harás todo lo que yo te diga, sin rechistar, me da igual si te gusta o no esa chica, yo la quiero y tu me la darás, no te he pedido, ni te he preguntado, si te gusta, ni te he pedido que te enamores de ella, quiero simplemente que la hagas de nosotros, ya. –él hizo con la cara que si. –lo has entendido espero no tener que repetirlo, ahora entraras ahí, utilizaras tu armas para ser muy amable con ella, creo que es bastante sencillo no crees. –él le afirmo con la cara. Miro a otro lado mientras intentaba respirar de nuevo, se volvió y vio venir a Nehira, sólo le miraba, ahora había recordado su nombre por fin, ella no decía, se acerco a él, muy cerca cada vez más, él la miraba extrañado, si se había puesto de vuelta y media, ahora se acercaba puso un dedo en los labios de él símbolo de silencio, que había tomado en la fiesta pensó él, cuando sus labios se acercaban a los suyos, su respiración, se puso mas fuerte cuando sintió el roce de sus labios en los de él, pero entonces, él la cogió por la cintura y la abrazo fuerte respondiendo su beso con toda la pasión del mundo, los devoraba como si fueran suyos, cerro los ojos sintiendo y cuando los abrió era Alexia y sonreía ahora soltándose.
-Me he dado cuenta que te es muy indiferente. –le dijo con una sonrisa. –Eso si no te enamores, hace muchos años alguien me traiciono, por que se enamoro, tu no te puedes dar ese lujo, espero que esto te quede claro. Sino. –hizo el gesto de cortarle el cuello, eso si con una bella sonrisa, mientras caminada para adentro.
Iris bailaba entre dos chicos de lo más sensual, Nehira miro para otro lado y le vio a él de nuevo entrar en la fiesta, se acerco a ella.
-Siento haber sido un poco borde. –ella le miro ahora.
-También lo siento. –ella volvió a mirar a su amiga que se besaba primero con uno y luego con otro, con los que bailaba. –Creo que esta fiesta no era lo que yo esperaba, creo que me voy a casa. –él le cogió un poco la muñeca a ella, la miro a los ojos.
-Te llevo en mi moto. –levanto la mano ahora. –prometo no correr demasiado, no hacer que corras peligro. –de repente él sonrió y ella le miro de nuevo, pero de otra manera.
-De acuerdo. –le dijo ella. –voy a por una chaqueta que he traído. –él le hizo que de acuerdo. Alexia ahora sonreía contenta, todo salía muy bien.
Ella miro la moto él que tenia el casco la miraba, se lo acerco a ella que se lo coloco, él se subió a la moto, ella se remango un poco el vestido, él la miro ahora se veían unas preciosas piernas que habían pasado desapercibidas para él hasta ahora, se subió en la moto detrás de él, pero se cogió a sus hombros, él la miro ahora.
-No, si te coges así te caerás. –él cogió una de sus manos y la puso en su cintura. Ella bajo la otra y le cogió tímida. –Abrázate fuerte o te caerás. –ella acerco sus manos hasta que estuvo una con la otra, tocaba su estomago, él podía sentir su cuerpo caliente detrás, ahora pensó de repente mientras le daba al acelerador de la moto, que no le disgustaba tanto que ella no tuviera demasiado pecho, lo compensaba con unas piernas preciosas, unos ojos muy seductores, por que si también la había mirado a los ojos pensó mientras arrancaba.
Valeria estaba muy preocupada ahora miraba a Natael.
-Iris esta cerca de ella. –él se abrazo con la gabardina ahora a si mismo miro por la pantallita que veía todo, la miraron en la moto.
-Vaya no veo a Iris por ningún sitio. –ella se acerco y toco la pantalla ahora.
-¿Quien es este chico, que esta con mi hija?
-Ángel… -ella le miro, era un Ángel.
Continuara…
#104
10/12/2011 02:38
:O Sorprendida es lo que estoy, yo he amado esta serie pero no creo que tanto como tú.
La vida esta basada en casualidades y sorpresas, pues ayer me puse a mirar foros, me meti en las series y recorde ángel o demonio aquella serie que tanto me gustaba entre a los foros y vi este titulo me interese y hoy a las doce de la noche me puse a leer, con esto decirte que después de dos horas y media he de agradecerte por tu gran esfuerzo y que me encanta la manera que tiene de expresarte ya que esto me parece maravilloso.
Y solo te pido por favor que publiques ya que me has dejado con ganas de seguir leyendo y ver lo que pasará una gran imaginación.
Por favor más escenas de ALEXIA-NATAEL ya que soy una gran fan de esta pareja.
Tambien veo un próxima parejita NEHIRA-ÁNGEL.
Publica pronto y gracias :)
La vida esta basada en casualidades y sorpresas, pues ayer me puse a mirar foros, me meti en las series y recorde ángel o demonio aquella serie que tanto me gustaba entre a los foros y vi este titulo me interese y hoy a las doce de la noche me puse a leer, con esto decirte que después de dos horas y media he de agradecerte por tu gran esfuerzo y que me encanta la manera que tiene de expresarte ya que esto me parece maravilloso.
Y solo te pido por favor que publiques ya que me has dejado con ganas de seguir leyendo y ver lo que pasará una gran imaginación.
Por favor más escenas de ALEXIA-NATAEL ya que soy una gran fan de esta pareja.
Tambien veo un próxima parejita NEHIRA-ÁNGEL.
Publica pronto y gracias :)
#105
11/12/2011 22:09
Capitulo 16 Descubrirlo por si misma
-No es un Ángel y esta cerca de Nehira, pero no por que quiera sino se lo ordena Alexia, esta influenciado por su poder, ahora es su súbdito y hará todo lo que ella le pida. –ella le miro. –ha intentando matarla dos veces. –ella puso la mano en su boca ahora asustada. –pero dos de ella se arrepintió, una cuando intento atropellarla, te acuerdas que tu lo impediste. –ella afirmo con la cara. –y otra en la piscina, quiso ahogarla, pero yo se lo impedí, no sabes como. –ahora bajo la mirada y se abrazo con el chubasquero tímido, era reacio de hablar de aquello, pero por una vez quiso abrir su corazón, a la persona que sentía mas cercana. –pues… -ella le miro. –bese Alexia. –ella le miro.
-Has besado Alexia, vaya. –dijo volviendo a mirar la moto como iba la parejita en ella. –Sentiste algo… -le dijo mirándole de nuevo.
-Tu que sentiste Valeria cuando le volviste a ver después de todo este tiempo. –ella bajo la mirada y le contesto.
-Lo mismo, como si hubiera sido ayer, que estábamos juntos, pero lo nuestro siempre ha existido durante todos estos años, nuestro amor ha estado muy vivo, permanece en ella… -la señalo Nehira. –ahora se volvió y puso la mano en su hombro, le miro a los ojos. –Y tú que sentiste. –él se soltó como si huyera volvió a poner su cara indescifrable.
-Lo mismo que sentí hace quinientos años. –quito la vista como si aquello verdaderamente volviera afectarle. –Creía que estaba muerto, entre todo el odio que nos hemos procesado en medio de todo esto.-la miro nuevamente. –No hay esperanza, ya no vosotros estáis en el mismo bando, pero Alexia hace muchos años que en su corazón solo hay odio, somos demasiados diferentes. –Me aferre a otros sentimientos. –ella bajo la mirada ahora huyendo de la suya, sabia a que se refería. –pero ella existe en algún lugar de ahí, esta aferrada dentro de mi, eso me vuelve vulnerable, ahora soy yo el que tiene miedo, a… -ella le miro y le cogió la mano ahora.
-No te dejare caer al lado oscuro… -los dos se miraban alguien carraspeo mirando la escena era un Damián que la escena le resulto bastante desagradable si estaba celoso de ellos, de esa relación que tenían Valeria le miro ahora señalo pantalla. –Nehira se dirige en moto al abismo… -los tres miraron la pantalla.
El apretaba el acelerador mientras, estaba metido en sus pensamientos podía sentir sus manos eran cálidas, suaves, le sujetaban con fuerza para no caer, sentía su aliento en oído, lleva un rato pensando como seria tocarla, besarla, fundirse con ella, tenia tanta calidez, le daba tanta paz, fue abrazarle y sentirse tan bien tan a gusto, tanta serenidad, tan paz, tanta pasión, si eso también luchaba con su interior, deseaba parar en un camino oscuro, besarla, acariciarla por encima de ese vestido, saber por el tacto, como se ponía de gallina su piel, saber por el contorno de sus manos, si correspondería esas caricias, de repente sintió el tintineo de su nombre en su oído ella le decía algo a él.
-Ángel. –que bien sonaba su nombre en sus labios, que manera tenia de nombrarlo que musicalidad. Apretó su cintura un poco con sus manos. –este no es el camino de casa. –se volvió un poco la miro echándole una pequeña sonrisa de repente empezó a minorar la marcha y se metió en un camino, que daba muchos botes, ella no entendía nada y se estaba asustando, empezaron a pasar todas las imágenes que ahora o antes no había recordado pero que ahora martilleaban, en su mente. Cuando la fue atropellar, cuando la salvo de la piscina, pero también de repente vino a su mente la escena de aquel tipo que le empujaba para a dentro. –para por favor. –le dijo ella con voz asustada.
-no hemos llegado todavía. –ella estaba muy asustada.
-Para o me bajo en marcha. –él paro ahora y ella se soltó de su cintura, quería bajar pero le costaba con el vestido, él se bajo de la moto y la vio a ella que quería bajar, se acerco y puso las manos por dentro de la chaqueta tocando ahora su cintura, podía sentir su cuerpo debajo del vestido, era sinuosamente perfecto, su cintura era tan perfecta, que él se estaba sintiendo cada vez, más y mas atraído por ella. Al cogerla la fue bajando echándole una mirada arrebatadoramente perfecta.
-quería llevarte a ver un sitio que me gusta. –ella le miro ahora, fijamente se apoyo un poco en la moto, él la miraba de una manera, era como si ese Ángel, fuera uno distinto de él de la fiesta, él del hospital, su voz era mas suave, se veía que escondía sinceridad.
-Me dijiste que me llevarías a casa. –ella se apoyo levemente en la moto, con una mano, al hacer ese movimiento la chaqueta se abrió dejando ver de nuevo su figura, él vio algo que brillaba en su pecho, era como un colgante, se quedo mirándolo como si le hipnotizara.
-Deseaba que vieras este sitio. –mientras se acercaba a ella que se quedo acorralada entre la moto y él que la miraba como si estuviera hipnotizado, acerco su mano a un mechón de pelo rubio, lo quito de encima de su chaqueta, que esta cubría su pecho, aparto la chaqueta un poco, ella estaba como paralizada, sólo contesto cuando la mano de él se acerco peligrosamente, dónde había quitado la chaqueta, pero ella intercepto su mano, antes que la pusiera, dónde ella todavía no le había dado permiso para que se pusiera allí. Los dos se miraron a los ojos ahora, él sonrió levemente. –sólo quería ver el collar. –ella le dejo la mano y la acerco a su collar, que caía deslizándose cerca de su pecho, él lo cogió, pero con sus dedos rozaron suavemente, como si de una caricia sin importancia fuera, el contorno de su piel, produciendo en ella el efecto, que no quería, su musculo se tenso el de su pecho, ella se tapo avergonzada, con la chaqueta, y tímida. Él se quedo mirando el collar y mirándola a ella. –me encanta es precioso.
-me lo regalo mi hermana Valeria. –ella lo cogió y lo dejo colgando de nuevo.
-bueno quieres ver, mi sitio favorito. –ella le miro a él, que se alejo un poco de ella ahora, ella se cogía la chaqueta cerrándola con las dos manos tímida. Le afirmo con la cara mientras le seguía, él caminaba delante de ella, pero el camino era difícil y ella se quedo un poco atrás, volvió un poco para atrás y le dio la mano, él se la cogió ahora, tiro un poquito de ella, cuando llego era un gran acantilado, habían subido arriba se veían las luces de la ciudad al fondo, él sonrió ahora. –Vengo muy a menudo. –ella que se abrazaba a si misma con la chaqueta sonrió un poco.
-Aquí vienes con tus ligues verdad. –él se volvió sonriendo a ella, levantando una ceja. –A liarte con ellas seguro, a ellas les parecerá romántico este sitio, seguro que se te han resistido pocas. –él se acerco a ella ahora muy cerca peligrosamente cerca.
-Por que lo analizas tanto Nehira, todo. –le dijo él acercando la mano a su frente. –por que tu cabecita, no deja de analizar todo, por que no eres menos reflexiva, por que no te dejas mas llevar.
-Por que no soy así… -le dijo ella desviando la mirada ahora un poco. Él se aparto un poco.
-Desde luego ni tu nombre es corriente, ni tu tampoco lo eres, puedo contarte por que me gusta este sitio. –ella le hizo con la cara que si. –Me recuerda a mi madre, antes de morir yo tenia unos nueve años o así, me dijo que ella estaría ahí, con las estrellas, que me miraría, que siempre estaría conmigo. –la miro a ella ahora. –Bueno tu tienes una madre que te quiere verdad esta contigo, no puede saber, que es que tu madre te abandone… -él se quedo pensativo. –Aunque ella no quería abandonarme, siempre que estoy aquí es como si ella estuviera conmigo, como si me mirara desde el cielo.
-No es un Ángel y esta cerca de Nehira, pero no por que quiera sino se lo ordena Alexia, esta influenciado por su poder, ahora es su súbdito y hará todo lo que ella le pida. –ella le miro. –ha intentando matarla dos veces. –ella puso la mano en su boca ahora asustada. –pero dos de ella se arrepintió, una cuando intento atropellarla, te acuerdas que tu lo impediste. –ella afirmo con la cara. –y otra en la piscina, quiso ahogarla, pero yo se lo impedí, no sabes como. –ahora bajo la mirada y se abrazo con el chubasquero tímido, era reacio de hablar de aquello, pero por una vez quiso abrir su corazón, a la persona que sentía mas cercana. –pues… -ella le miro. –bese Alexia. –ella le miro.
-Has besado Alexia, vaya. –dijo volviendo a mirar la moto como iba la parejita en ella. –Sentiste algo… -le dijo mirándole de nuevo.
-Tu que sentiste Valeria cuando le volviste a ver después de todo este tiempo. –ella bajo la mirada y le contesto.
-Lo mismo, como si hubiera sido ayer, que estábamos juntos, pero lo nuestro siempre ha existido durante todos estos años, nuestro amor ha estado muy vivo, permanece en ella… -la señalo Nehira. –ahora se volvió y puso la mano en su hombro, le miro a los ojos. –Y tú que sentiste. –él se soltó como si huyera volvió a poner su cara indescifrable.
-Lo mismo que sentí hace quinientos años. –quito la vista como si aquello verdaderamente volviera afectarle. –Creía que estaba muerto, entre todo el odio que nos hemos procesado en medio de todo esto.-la miro nuevamente. –No hay esperanza, ya no vosotros estáis en el mismo bando, pero Alexia hace muchos años que en su corazón solo hay odio, somos demasiados diferentes. –Me aferre a otros sentimientos. –ella bajo la mirada ahora huyendo de la suya, sabia a que se refería. –pero ella existe en algún lugar de ahí, esta aferrada dentro de mi, eso me vuelve vulnerable, ahora soy yo el que tiene miedo, a… -ella le miro y le cogió la mano ahora.
-No te dejare caer al lado oscuro… -los dos se miraban alguien carraspeo mirando la escena era un Damián que la escena le resulto bastante desagradable si estaba celoso de ellos, de esa relación que tenían Valeria le miro ahora señalo pantalla. –Nehira se dirige en moto al abismo… -los tres miraron la pantalla.
El apretaba el acelerador mientras, estaba metido en sus pensamientos podía sentir sus manos eran cálidas, suaves, le sujetaban con fuerza para no caer, sentía su aliento en oído, lleva un rato pensando como seria tocarla, besarla, fundirse con ella, tenia tanta calidez, le daba tanta paz, fue abrazarle y sentirse tan bien tan a gusto, tanta serenidad, tan paz, tanta pasión, si eso también luchaba con su interior, deseaba parar en un camino oscuro, besarla, acariciarla por encima de ese vestido, saber por el tacto, como se ponía de gallina su piel, saber por el contorno de sus manos, si correspondería esas caricias, de repente sintió el tintineo de su nombre en su oído ella le decía algo a él.
-Ángel. –que bien sonaba su nombre en sus labios, que manera tenia de nombrarlo que musicalidad. Apretó su cintura un poco con sus manos. –este no es el camino de casa. –se volvió un poco la miro echándole una pequeña sonrisa de repente empezó a minorar la marcha y se metió en un camino, que daba muchos botes, ella no entendía nada y se estaba asustando, empezaron a pasar todas las imágenes que ahora o antes no había recordado pero que ahora martilleaban, en su mente. Cuando la fue atropellar, cuando la salvo de la piscina, pero también de repente vino a su mente la escena de aquel tipo que le empujaba para a dentro. –para por favor. –le dijo ella con voz asustada.
-no hemos llegado todavía. –ella estaba muy asustada.
-Para o me bajo en marcha. –él paro ahora y ella se soltó de su cintura, quería bajar pero le costaba con el vestido, él se bajo de la moto y la vio a ella que quería bajar, se acerco y puso las manos por dentro de la chaqueta tocando ahora su cintura, podía sentir su cuerpo debajo del vestido, era sinuosamente perfecto, su cintura era tan perfecta, que él se estaba sintiendo cada vez, más y mas atraído por ella. Al cogerla la fue bajando echándole una mirada arrebatadoramente perfecta.
-quería llevarte a ver un sitio que me gusta. –ella le miro ahora, fijamente se apoyo un poco en la moto, él la miraba de una manera, era como si ese Ángel, fuera uno distinto de él de la fiesta, él del hospital, su voz era mas suave, se veía que escondía sinceridad.
-Me dijiste que me llevarías a casa. –ella se apoyo levemente en la moto, con una mano, al hacer ese movimiento la chaqueta se abrió dejando ver de nuevo su figura, él vio algo que brillaba en su pecho, era como un colgante, se quedo mirándolo como si le hipnotizara.
-Deseaba que vieras este sitio. –mientras se acercaba a ella que se quedo acorralada entre la moto y él que la miraba como si estuviera hipnotizado, acerco su mano a un mechón de pelo rubio, lo quito de encima de su chaqueta, que esta cubría su pecho, aparto la chaqueta un poco, ella estaba como paralizada, sólo contesto cuando la mano de él se acerco peligrosamente, dónde había quitado la chaqueta, pero ella intercepto su mano, antes que la pusiera, dónde ella todavía no le había dado permiso para que se pusiera allí. Los dos se miraron a los ojos ahora, él sonrió levemente. –sólo quería ver el collar. –ella le dejo la mano y la acerco a su collar, que caía deslizándose cerca de su pecho, él lo cogió, pero con sus dedos rozaron suavemente, como si de una caricia sin importancia fuera, el contorno de su piel, produciendo en ella el efecto, que no quería, su musculo se tenso el de su pecho, ella se tapo avergonzada, con la chaqueta, y tímida. Él se quedo mirando el collar y mirándola a ella. –me encanta es precioso.
-me lo regalo mi hermana Valeria. –ella lo cogió y lo dejo colgando de nuevo.
-bueno quieres ver, mi sitio favorito. –ella le miro a él, que se alejo un poco de ella ahora, ella se cogía la chaqueta cerrándola con las dos manos tímida. Le afirmo con la cara mientras le seguía, él caminaba delante de ella, pero el camino era difícil y ella se quedo un poco atrás, volvió un poco para atrás y le dio la mano, él se la cogió ahora, tiro un poquito de ella, cuando llego era un gran acantilado, habían subido arriba se veían las luces de la ciudad al fondo, él sonrió ahora. –Vengo muy a menudo. –ella que se abrazaba a si misma con la chaqueta sonrió un poco.
-Aquí vienes con tus ligues verdad. –él se volvió sonriendo a ella, levantando una ceja. –A liarte con ellas seguro, a ellas les parecerá romántico este sitio, seguro que se te han resistido pocas. –él se acerco a ella ahora muy cerca peligrosamente cerca.
-Por que lo analizas tanto Nehira, todo. –le dijo él acercando la mano a su frente. –por que tu cabecita, no deja de analizar todo, por que no eres menos reflexiva, por que no te dejas mas llevar.
-Por que no soy así… -le dijo ella desviando la mirada ahora un poco. Él se aparto un poco.
-Desde luego ni tu nombre es corriente, ni tu tampoco lo eres, puedo contarte por que me gusta este sitio. –ella le hizo con la cara que si. –Me recuerda a mi madre, antes de morir yo tenia unos nueve años o así, me dijo que ella estaría ahí, con las estrellas, que me miraría, que siempre estaría conmigo. –la miro a ella ahora. –Bueno tu tienes una madre que te quiere verdad esta contigo, no puede saber, que es que tu madre te abandone… -él se quedo pensativo. –Aunque ella no quería abandonarme, siempre que estoy aquí es como si ella estuviera conmigo, como si me mirara desde el cielo.
#106
11/12/2011 22:10
Valeria miraba la escena ahora se volvió a Damián ahora.
-Desde luego no se si su madre le estará mirando desde el cielo, pero a Nehira la estamos mirando nosotros que somos sus padres. –Damián se acerco.
-Ese estúpido esta seduciendo a nuestra hija, nosotros aquí mirando, voy a ir le voy a dar. –ella se volvió y le cogió el brazo.
-No podemos hacer eso. Si Nehira se equivoca tendrá que hacerlo, no podemos, solo podemos aconsejarla, si se equivoca es su elección, sabes que yo también me equivoque, luego… -él la miro a Valeria.
-te equivocaste conmigo, esto es diferente, yo te amaba.
-Si pero al principio también estabas como Ángel, lo hacías por que te mandaba Alexia.
-Ese tipo se muy bien sus intenciones, Nehira es un ser inocente, bueno, dulce, para un demonio es un lujo pervertir algo tan hermoso, inocente.
-Eso era yo para ti… -él se acerco ahora.
-Yo te quiero, pero ese maldito, tiene las peores intenciones con Nehira, no le voy a dejar. –ella le sujeto de nuevo la mano a él.
-Nehira tiene que aprender a equivocarse, luego cuando sepa lo que es aprenderá a odiarle, no importara lo que sienta por él.
-Diecisiete años al lado de Natael y ya hablas como él. –le dijo mirándola. –tu también aprendiste a odiarme, no era eso lo que me pareció el otro día en la cama, la verdad. –ella sonrió ahora un poco tímida.
Nehira miro Ángel a los ojos, desprendía ternura hablando de su madre, eso le gusto mucho mas aquel chico superficial, que ella había mirado ahora se convertía en un chico bastante mas dulce, ella camino ahora muy despacio cerca del acantilado, estaba a un pies, una suave caricia la tiraría dentro de aquel barranco, cayendo para adentro de las luces, Ángel empezó a caminar hacia ella, se miro las manos y ahora las levanto suavemente se acerco al barranco, Nehira le sintió como se acercaba detrás de ella un pequeño empujón, se había acabado todo, cerro sus ojos, pero en vez de sentir que se caía, sintió como él la cogió con sus brazos, apretó su cintura tirando de ella hacia atrás.
-Que haces no te pongas en el filo. –ella le miro la cara de susto era terrible. –No vuelvas hacer eso. –ella puso la mano encima de las de él ahora mientras se volvía en el propio abrazo.
-Que te pasa. –él la miraba ahora estaba pálido. –dímelo, confía en mi. –él miro ahora.
-Esa parte no la he contado nunca a nadie. –apretó la cintura de ella ahora un poco, mientras no la soltaba. Ella le acaricio con su mano la cara.
-Mi madre, no murió de muerte natural, se suicidio, me trajo aquí, me dijo. –de repente el Ángel seguro de si mismo se derrumbo en brazos de Nehira. –Que estaría siempre conmigo, se acerco al barranco. No pude cogerla… -ella le miro ahora.
-Lo siento… -le dijo ella, pero sus manos se volvieron todavía más apresadoras, hicieron que recorrieran el camino que les separaba tirando de ella hasta que lo tuvo muy cerca.
-que tienes, que consigues cosas que nadie a conseguido, que contara… -miro sus labios, ella busco sus manos en su cintura y con una de ellas intento que la soltara. Pero entonces la apretó mas fuerte, contra su cuerpo, fue acercando sus labios hacia los de ellas, quería probarlos saborearlos, estar en sus brazos le daba una paz, que jamás había sentido, ella era especial, por eso la querían, era dulce, eterna, etérea, inocente, a la vez era seductora, sus ojos eras enormes, bellos, expresivos, seductores, dulces, sus hombros eran sensuales, sus curvas también lo era, era tan apetecible, quería poseerla ahora, la manera de empezar era fundiéndose en un beso, fue acercando sus labios mas a los suyos, sintió su corazón tan acelerado, podía sentir el tic, tac, fuerte cada vez, mas cerca, podía saber hasta como sabían sus labios, dio un pequeño suspiro él, quería poseerla, si un abrazo daba tanta paz, que seria fundirse con ella, pero ella quito la cara tímida, y él desistió. –voy a llevarte a tu casa. –ella le afirmo con la cara. Se subieron a la moto y llegaron, él se bajo de la moto hizo lo mismo de siempre, la bajo a ella poniéndole las dos manos en su cintura. –Creo que has llegado viva, no. –le dijo con una leve sonrisa. –ella miro para el portal que estaba mas adentro, vio una pareja besándose, él miro que miraba ella tan interesada. Se estaban dando un magreo pensó él mirándoles un poquito envidioso. –bueno estos no pierden el tiempo. –le dijo mirándola a ella.
-Me ha gustado mucho, todo. –le dijo mirándole a él.
-Podría haber estado mejor. –le dijo acariciándole ahora un mechón de su pelo. –otra vez será. –ella le miraba exhorta en sus bellos y penetrantes ojos marrones. Ella se volvió como para irse. Pero se volvió otra vez, de repente sin él esperarlo le dio un suave piquito y se quito corriendo. Él la miro ahora. Le suplico con la mirada se acercara, para que fuera aunque fuera la mitad de apasionado que la parejita del portal, que se comía literalmente.
-Podríamos quedar mañana, te gusta nadar. –él le afirmo con una sonrisa. –después de clase, quieres. –le dijo ella con una sonrisa. –hasta mañana.
-De acuerdo. –señalo la moto. –voy a mirarla un poco antes de irme me pareció que le pasaba algo. –ella se volvió y empezó a caminar hacia al portal, mientras se acercaba podía ver un poco mejor la parejita, él la tenia a la chica contra la pared, recorría sus manos por todo su cuerpo, mientras se comía literal sus labios, ella tenia metidas las manos por el jersey del chico, ella sonrió, pensando podían dejar algo para casa, saco las llaves de su bolso, se escuchaba el ruido de los besos, pero cuando abrió la puerta, encendió la luz, vio sus caras se quedo muerta literal.
Valeria. –dijo mirándola, ella estaba no podía respirar, el chico que se volvió ella le vio era su profesor de latín el famoso Damián. –Vaya, hermanita.
-quería hablar contigo te estaba esperando. –dijo con el aliento entre cortado abrochándose la camisa, hasta los pantalones.
-Desde luego no te aburrías. -ahora se colocaba un poco el pelo, mientras la miraba como la reprochaba.
-tengo que hablar seriamente contigo sobre ese chico el de la moto, no quiero que le vuelvas a ver. –Damián la miro ahora, esa era la Valeria comprensiva que hace un rato, en la guarida le decía que había que dejar a Nehira equivocarse.
-Como, vienes después de tantos años, sin saber de ti, vienes ahora te comportas como si fueras mi madre, perdona pero tu comportamiento hace cinco minutos era mucho peor que el mío, yo no he hecho nada con ese chico, pero tu… -la miro ahora. –súbete la cremallera del pantalón, no vengas a darme sermones por que no eres mi madre. –ella le cogió la muñeca ahora.
-Nehira, harás lo que yo te diga por que… -Damián la miro ahora.
Continuara…
Muchas gracias por tu mensaje, me ha dado un poquito de vidilla pensaba que ya nadie me leia, gracias por seguir esta historia.
-Desde luego no se si su madre le estará mirando desde el cielo, pero a Nehira la estamos mirando nosotros que somos sus padres. –Damián se acerco.
-Ese estúpido esta seduciendo a nuestra hija, nosotros aquí mirando, voy a ir le voy a dar. –ella se volvió y le cogió el brazo.
-No podemos hacer eso. Si Nehira se equivoca tendrá que hacerlo, no podemos, solo podemos aconsejarla, si se equivoca es su elección, sabes que yo también me equivoque, luego… -él la miro a Valeria.
-te equivocaste conmigo, esto es diferente, yo te amaba.
-Si pero al principio también estabas como Ángel, lo hacías por que te mandaba Alexia.
-Ese tipo se muy bien sus intenciones, Nehira es un ser inocente, bueno, dulce, para un demonio es un lujo pervertir algo tan hermoso, inocente.
-Eso era yo para ti… -él se acerco ahora.
-Yo te quiero, pero ese maldito, tiene las peores intenciones con Nehira, no le voy a dejar. –ella le sujeto de nuevo la mano a él.
-Nehira tiene que aprender a equivocarse, luego cuando sepa lo que es aprenderá a odiarle, no importara lo que sienta por él.
-Diecisiete años al lado de Natael y ya hablas como él. –le dijo mirándola. –tu también aprendiste a odiarme, no era eso lo que me pareció el otro día en la cama, la verdad. –ella sonrió ahora un poco tímida.
Nehira miro Ángel a los ojos, desprendía ternura hablando de su madre, eso le gusto mucho mas aquel chico superficial, que ella había mirado ahora se convertía en un chico bastante mas dulce, ella camino ahora muy despacio cerca del acantilado, estaba a un pies, una suave caricia la tiraría dentro de aquel barranco, cayendo para adentro de las luces, Ángel empezó a caminar hacia ella, se miro las manos y ahora las levanto suavemente se acerco al barranco, Nehira le sintió como se acercaba detrás de ella un pequeño empujón, se había acabado todo, cerro sus ojos, pero en vez de sentir que se caía, sintió como él la cogió con sus brazos, apretó su cintura tirando de ella hacia atrás.
-Que haces no te pongas en el filo. –ella le miro la cara de susto era terrible. –No vuelvas hacer eso. –ella puso la mano encima de las de él ahora mientras se volvía en el propio abrazo.
-Que te pasa. –él la miraba ahora estaba pálido. –dímelo, confía en mi. –él miro ahora.
-Esa parte no la he contado nunca a nadie. –apretó la cintura de ella ahora un poco, mientras no la soltaba. Ella le acaricio con su mano la cara.
-Mi madre, no murió de muerte natural, se suicidio, me trajo aquí, me dijo. –de repente el Ángel seguro de si mismo se derrumbo en brazos de Nehira. –Que estaría siempre conmigo, se acerco al barranco. No pude cogerla… -ella le miro ahora.
-Lo siento… -le dijo ella, pero sus manos se volvieron todavía más apresadoras, hicieron que recorrieran el camino que les separaba tirando de ella hasta que lo tuvo muy cerca.
-que tienes, que consigues cosas que nadie a conseguido, que contara… -miro sus labios, ella busco sus manos en su cintura y con una de ellas intento que la soltara. Pero entonces la apretó mas fuerte, contra su cuerpo, fue acercando sus labios hacia los de ellas, quería probarlos saborearlos, estar en sus brazos le daba una paz, que jamás había sentido, ella era especial, por eso la querían, era dulce, eterna, etérea, inocente, a la vez era seductora, sus ojos eras enormes, bellos, expresivos, seductores, dulces, sus hombros eran sensuales, sus curvas también lo era, era tan apetecible, quería poseerla ahora, la manera de empezar era fundiéndose en un beso, fue acercando sus labios mas a los suyos, sintió su corazón tan acelerado, podía sentir el tic, tac, fuerte cada vez, mas cerca, podía saber hasta como sabían sus labios, dio un pequeño suspiro él, quería poseerla, si un abrazo daba tanta paz, que seria fundirse con ella, pero ella quito la cara tímida, y él desistió. –voy a llevarte a tu casa. –ella le afirmo con la cara. Se subieron a la moto y llegaron, él se bajo de la moto hizo lo mismo de siempre, la bajo a ella poniéndole las dos manos en su cintura. –Creo que has llegado viva, no. –le dijo con una leve sonrisa. –ella miro para el portal que estaba mas adentro, vio una pareja besándose, él miro que miraba ella tan interesada. Se estaban dando un magreo pensó él mirándoles un poquito envidioso. –bueno estos no pierden el tiempo. –le dijo mirándola a ella.
-Me ha gustado mucho, todo. –le dijo mirándole a él.
-Podría haber estado mejor. –le dijo acariciándole ahora un mechón de su pelo. –otra vez será. –ella le miraba exhorta en sus bellos y penetrantes ojos marrones. Ella se volvió como para irse. Pero se volvió otra vez, de repente sin él esperarlo le dio un suave piquito y se quito corriendo. Él la miro ahora. Le suplico con la mirada se acercara, para que fuera aunque fuera la mitad de apasionado que la parejita del portal, que se comía literalmente.
-Podríamos quedar mañana, te gusta nadar. –él le afirmo con una sonrisa. –después de clase, quieres. –le dijo ella con una sonrisa. –hasta mañana.
-De acuerdo. –señalo la moto. –voy a mirarla un poco antes de irme me pareció que le pasaba algo. –ella se volvió y empezó a caminar hacia al portal, mientras se acercaba podía ver un poco mejor la parejita, él la tenia a la chica contra la pared, recorría sus manos por todo su cuerpo, mientras se comía literal sus labios, ella tenia metidas las manos por el jersey del chico, ella sonrió, pensando podían dejar algo para casa, saco las llaves de su bolso, se escuchaba el ruido de los besos, pero cuando abrió la puerta, encendió la luz, vio sus caras se quedo muerta literal.
Valeria. –dijo mirándola, ella estaba no podía respirar, el chico que se volvió ella le vio era su profesor de latín el famoso Damián. –Vaya, hermanita.
-quería hablar contigo te estaba esperando. –dijo con el aliento entre cortado abrochándose la camisa, hasta los pantalones.
-Desde luego no te aburrías. -ahora se colocaba un poco el pelo, mientras la miraba como la reprochaba.
-tengo que hablar seriamente contigo sobre ese chico el de la moto, no quiero que le vuelvas a ver. –Damián la miro ahora, esa era la Valeria comprensiva que hace un rato, en la guarida le decía que había que dejar a Nehira equivocarse.
-Como, vienes después de tantos años, sin saber de ti, vienes ahora te comportas como si fueras mi madre, perdona pero tu comportamiento hace cinco minutos era mucho peor que el mío, yo no he hecho nada con ese chico, pero tu… -la miro ahora. –súbete la cremallera del pantalón, no vengas a darme sermones por que no eres mi madre. –ella le cogió la muñeca ahora.
-Nehira, harás lo que yo te diga por que… -Damián la miro ahora.
Continuara…
Muchas gracias por tu mensaje, me ha dado un poquito de vidilla pensaba que ya nadie me leia, gracias por seguir esta historia.
#107
12/12/2011 14:59
PRECIOSA estoy cada dia mas enganchada
gracias por segir dando vida a esta gran serie y gran historia de amor
gracias por segir dando vida a esta gran serie y gran historia de amor
#108
12/12/2011 20:20
ME ENCANTA! pero porfa pon más cosa de Natael y Alexia me encantaría que volviera a pasar algo, ¿Has pensado en acompañarlo con imágenes?
Esperando el próximo, un beso.
Esperando el próximo, un beso.
#109
16/12/2011 15:37
Ke cosas tenes como nadie va leer sta 3ª temporada de sta gran serie ke fue ke gracias ati revivio
asi ke sigue asi, m encanta como scribes stoi super engancha
espero ke escribas mu pronto x ke sino no aguanto con tanto suspense jejejeje :)
asi ke sigue asi, m encanta como scribes stoi super engancha
espero ke escribas mu pronto x ke sino no aguanto con tanto suspense jejejeje :)
#110
10/01/2012 22:36
Capitulo 17 La huida
-Olvídame Valeria. –camino de nuevo hacia la moto se subió ahora a la misma, se agarro al chico, la moto salió a mucha velocidad, Valeria camino hacia la moto pero se había ido se volvió hacia Damián mirándole.
-Que he hecho mal. –dijo mientras las lágrimas caían por sus mejillas, él la acerco y la abrazo ahora.
-Ser demasiado dura con ella, apenas os conocéis, Valeria. –le dijo mientras acariciaba su pelo. Ángel sentía sus manos en su cintura no había entendido por que volvía de nuevo, pero ahora acerco sus labios a su oído.
-Donde vamos. –le pregunto el chico. Ella se quedo pensativa apretó levemente su cintura.
-Donde tú quieras. –el sonrió sus ojos se pusieron de un verde intenso, mientras miraba la carretera.
Natael miraba la escena ahora preocupado se abrazo a si mismo perdían Nehira. Aparco la moto en el garaje de su casa Nehira se quedo seria ahora, viendo la situación era la casa de aquel chico que no sabia absolutamente nada, la cogió por la cintura mientras muy suavemente la llevaba, ella sintió la presión de todo cada estancia que pasaba caminando mas le temblaban las piernas, por que había hecho eso, por que había huido, tenia miedo pero de que, por que no estaba en su casa, no estaba preparada para todo eso no lo sentía, ella había visto al chico con su amiga, pero ella no era como ella no era tan atrevida, le miro de nuevo era muy guapo, pero hasta el punto de perder todos su valores, abrió la habitación, había una cama muy grande o le pareció a ella, pero ella ahora fue la que se soltó de su mano, le miro apoyada contra la puerta mientras él tiraba la chaqueta a la cama y la miraba a ella allí apoyada en la puerta mirándole.
-Te vas a quedar ahí toda la noche. –le dijo el que ávido ya se estaba desabrochando la camisa mirándola.
-Creo que no ha sido buena idea, es mejor que me vaya, puedes llamar a un taxi. –él la miro a ella paro lo que estaba haciendo que era desabrocharse la camisa se sentó en la cama mirándola.
-No entiendo nada, llévame dónde tu quieras has dicho. –se levanto ahora y camino hacia ella, que se agarraba al pomo de la puerta, mirándole. –que te pasa te decides o no. –acerco su mano a su pelo rubio lo acaricio mirándola. Como seria tener su frescura en sus manos, también le daría esa paz que trasmitía. –que ha pasado Nehira quien era aquella pareja, que hablaste con ellos para que salieras corriendo, yo te he contado mis cosas cuéntame.
-Es mi hermana Valeria lleva años sin estar en casa y ahora. –se soltó de su mirada camino por la habitación. –me dice que es lo que debo o no hacer. No se que la pasa, se cree mi madre o no sé. –el sonrió ahora.
-Pasa de tu hermana. –le dijo él. –sabes esta empezando a entrarme sueño. –se empezó a quitar la camisa, ella respiro profundamente. –ya que estamos aquí, que tal si. –fue caminando hacia ella que medio daba vueltas por la cama.
-No. –ella se paro, él la miraba divertido. –creo que voy al teléfono a llamar a un taxi, y tu podrás dormir tranquilo.
-Olvídame Valeria. –camino de nuevo hacia la moto se subió ahora a la misma, se agarro al chico, la moto salió a mucha velocidad, Valeria camino hacia la moto pero se había ido se volvió hacia Damián mirándole.
-Que he hecho mal. –dijo mientras las lágrimas caían por sus mejillas, él la acerco y la abrazo ahora.
-Ser demasiado dura con ella, apenas os conocéis, Valeria. –le dijo mientras acariciaba su pelo. Ángel sentía sus manos en su cintura no había entendido por que volvía de nuevo, pero ahora acerco sus labios a su oído.
-Donde vamos. –le pregunto el chico. Ella se quedo pensativa apretó levemente su cintura.
-Donde tú quieras. –el sonrió sus ojos se pusieron de un verde intenso, mientras miraba la carretera.
Natael miraba la escena ahora preocupado se abrazo a si mismo perdían Nehira. Aparco la moto en el garaje de su casa Nehira se quedo seria ahora, viendo la situación era la casa de aquel chico que no sabia absolutamente nada, la cogió por la cintura mientras muy suavemente la llevaba, ella sintió la presión de todo cada estancia que pasaba caminando mas le temblaban las piernas, por que había hecho eso, por que había huido, tenia miedo pero de que, por que no estaba en su casa, no estaba preparada para todo eso no lo sentía, ella había visto al chico con su amiga, pero ella no era como ella no era tan atrevida, le miro de nuevo era muy guapo, pero hasta el punto de perder todos su valores, abrió la habitación, había una cama muy grande o le pareció a ella, pero ella ahora fue la que se soltó de su mano, le miro apoyada contra la puerta mientras él tiraba la chaqueta a la cama y la miraba a ella allí apoyada en la puerta mirándole.
-Te vas a quedar ahí toda la noche. –le dijo el que ávido ya se estaba desabrochando la camisa mirándola.
-Creo que no ha sido buena idea, es mejor que me vaya, puedes llamar a un taxi. –él la miro a ella paro lo que estaba haciendo que era desabrocharse la camisa se sentó en la cama mirándola.
-No entiendo nada, llévame dónde tu quieras has dicho. –se levanto ahora y camino hacia ella, que se agarraba al pomo de la puerta, mirándole. –que te pasa te decides o no. –acerco su mano a su pelo rubio lo acaricio mirándola. Como seria tener su frescura en sus manos, también le daría esa paz que trasmitía. –que ha pasado Nehira quien era aquella pareja, que hablaste con ellos para que salieras corriendo, yo te he contado mis cosas cuéntame.
-Es mi hermana Valeria lleva años sin estar en casa y ahora. –se soltó de su mirada camino por la habitación. –me dice que es lo que debo o no hacer. No se que la pasa, se cree mi madre o no sé. –el sonrió ahora.
-Pasa de tu hermana. –le dijo él. –sabes esta empezando a entrarme sueño. –se empezó a quitar la camisa, ella respiro profundamente. –ya que estamos aquí, que tal si. –fue caminando hacia ella que medio daba vueltas por la cama.
-No. –ella se paro, él la miraba divertido. –creo que voy al teléfono a llamar a un taxi, y tu podrás dormir tranquilo.
#111
10/01/2012 22:37
-Yo no he dicho nada de dormir. –la miro con unos ojos viciosillo a ella que volvió a tragar fuerte. Ella camino deprisa para la puerta la abrió.
-Donde tienes el teléfono. –el se acerco ahora.
-para que quieres el móvil. –dijo él con una sonrisa, ella abrió su bolso, buscaba el teléfono vio una llamada perdida de Valeria, hasta de su madre. Lo metió de nuevo en el bolso, le miro de nuevo a él, que no entendía nada. Se acerco a ella puso la mano en su hombro, la miro a los ojos mientras con la otra mano la acercaba a su fina figura la acerco ahora muy bruscamente hacia él, la miro muy fijamente a los ojos, de repente sus ojos se pusieron de un verde muy intenso. Ella entonces perdió su voluntad. –Así me gusta. –fue acercar sus labios a los de ella pero de repente le vio, un tío con un chubasquero. Ella se quedo esperando su beso, era presa de su voluntad. –Que haces aquí quien eres tu.
-tu conciencia. –él la soltó a ella, mirándole. –vengo a buscar Nehira. –él la dejo a ella pero estaba completamente en un trance era como si no les escuchara. –Quieres poseerla así. –le dijo acercándose a él. –Se que hay en tu corazón, se lo que sientes.
-tu no sabes nada. –le dijo ahora poniendo chulo. –te aconsejo que te vallas. –se acerco y le cogió de la solapa. –quiero que te vayas.
-No me voy a ir sin Nehira. –le dijo ahora mirándole. –no puedes mentirme Ángel, puedes hacerlo a ti mismo pero a mi no puedes. –ahora le soltó y le miro. –si se que estas pensando, la paz que te da, sus brazos, cuando te toca. –le miro desconcertado. –si es especial, Nehira es hija de dos ángeles, por eso es especial, y tu no quieres esto.
-No dejare que te la lleves. –se acerco abrazándola. –esta noche será mía, no puedes impedirlo.
-No puedes hacer eso, no esta bien, no es lo correcto, no tienes cuenta lo que puede sentir ella, lo que siente ella, por que ella siente algo por ti. -De repente se sintió un frio una luz empujo a Natael contra el suelo apareció Alexia. La miro desde el suelo.
-Ángel no le eches cuenta a este viejo aburrido, podrás tenerla para siempre, para siempre, ya no dudara nunca de lo que siente, cuando estés cerca de ella te hará sentir tan bien, recorréis el mundo del mal juntos. –natael se levanto del suelo.
-Ella no será la misma mas, perderá todo esa bondad será como iris o como alexia, luego no sentirá jamás, sólo querrá hacer el mal, eso es lo que quieres para ella. –Alexia se acerco a su discípulo ahora susurrándole casi al oído.
-vas echar cuenta a este viejo, mírala que deseas, haz lo que deseas, ella también lo desea. -acerco su mano al hombro de ella. El la dejo encima de la cama a ella que permanecía inconsciente todavía, Alexia dijo el nombre de él, como si se lo dijera a ella, ella acerco su mano a sus labios, se mordió su propia mano mientras ahora se quitaba el pelo estaba como poseída decía su nombre mientras se movía sinuosamente en la cama, gemía y todo. –Natael junto las muñecas fuertemente y con un golpe de viento tiro Alexia lejos de ella. Se acerco a la cama y toco la mano de la chica, mientras decía su nombre. El chico permanecía lejos de ella, mirando todo. Ella empezó a despertar de su trance. Natael se alejo ahora para permanecer lejos de su mirada.
-Vas hacer lo correcto Ángel, el bien aun sigue en ti. –dijo mientras se desvanecía. Él le faltaba decir que no había dicho no se iría sin ella, ella empezó a mirarle como un gatito asustado en la cama, se abrazo y le miro.
-¿Que ha pasado? –dijo ella levantándose de la cama.-sólo recuerdo una luz.
-te has desmallado. –dijo él que se puso de nuevo la camisa que estaba tirada en la habitación. –te he dejado en la cama, será mejor que te lleve a tu casa.
-no quiero ir. –dijo ella bajando la mirada. –no soporto a mi hermana, quiero quedarme aquí. –él la miro.
-esta bien dormiré en el sofá. –dijo él mirándola y alejándose de ella ahora. Él se marchaba ahora pero ella le hizo volverse de nuevo la miro como se arre cucaba en el almohada.
-Ángel Gracias. –cada paso que daba alejándose de ella, mas le pesaba, mas y mas, era una huida…
Continuara…
Siento lo que he tardado pero estoy bastante des concentrada con la historia, ya no queda mucho para el final, ahí teneis una pequeña escena natael y Alexia, no salen mucho los personajes principales por que todos se desarrolla alrededor de Nehira y Angel tengo que desarrollar su historia para poder desarrollar las demás. Feliz Año a todos, por cierto voy a ver toledo que sale Jaime olias.
-Donde tienes el teléfono. –el se acerco ahora.
-para que quieres el móvil. –dijo él con una sonrisa, ella abrió su bolso, buscaba el teléfono vio una llamada perdida de Valeria, hasta de su madre. Lo metió de nuevo en el bolso, le miro de nuevo a él, que no entendía nada. Se acerco a ella puso la mano en su hombro, la miro a los ojos mientras con la otra mano la acercaba a su fina figura la acerco ahora muy bruscamente hacia él, la miro muy fijamente a los ojos, de repente sus ojos se pusieron de un verde muy intenso. Ella entonces perdió su voluntad. –Así me gusta. –fue acercar sus labios a los de ella pero de repente le vio, un tío con un chubasquero. Ella se quedo esperando su beso, era presa de su voluntad. –Que haces aquí quien eres tu.
-tu conciencia. –él la soltó a ella, mirándole. –vengo a buscar Nehira. –él la dejo a ella pero estaba completamente en un trance era como si no les escuchara. –Quieres poseerla así. –le dijo acercándose a él. –Se que hay en tu corazón, se lo que sientes.
-tu no sabes nada. –le dijo ahora poniendo chulo. –te aconsejo que te vallas. –se acerco y le cogió de la solapa. –quiero que te vayas.
-No me voy a ir sin Nehira. –le dijo ahora mirándole. –no puedes mentirme Ángel, puedes hacerlo a ti mismo pero a mi no puedes. –ahora le soltó y le miro. –si se que estas pensando, la paz que te da, sus brazos, cuando te toca. –le miro desconcertado. –si es especial, Nehira es hija de dos ángeles, por eso es especial, y tu no quieres esto.
-No dejare que te la lleves. –se acerco abrazándola. –esta noche será mía, no puedes impedirlo.
-No puedes hacer eso, no esta bien, no es lo correcto, no tienes cuenta lo que puede sentir ella, lo que siente ella, por que ella siente algo por ti. -De repente se sintió un frio una luz empujo a Natael contra el suelo apareció Alexia. La miro desde el suelo.
-Ángel no le eches cuenta a este viejo aburrido, podrás tenerla para siempre, para siempre, ya no dudara nunca de lo que siente, cuando estés cerca de ella te hará sentir tan bien, recorréis el mundo del mal juntos. –natael se levanto del suelo.
-Ella no será la misma mas, perderá todo esa bondad será como iris o como alexia, luego no sentirá jamás, sólo querrá hacer el mal, eso es lo que quieres para ella. –Alexia se acerco a su discípulo ahora susurrándole casi al oído.
-vas echar cuenta a este viejo, mírala que deseas, haz lo que deseas, ella también lo desea. -acerco su mano al hombro de ella. El la dejo encima de la cama a ella que permanecía inconsciente todavía, Alexia dijo el nombre de él, como si se lo dijera a ella, ella acerco su mano a sus labios, se mordió su propia mano mientras ahora se quitaba el pelo estaba como poseída decía su nombre mientras se movía sinuosamente en la cama, gemía y todo. –Natael junto las muñecas fuertemente y con un golpe de viento tiro Alexia lejos de ella. Se acerco a la cama y toco la mano de la chica, mientras decía su nombre. El chico permanecía lejos de ella, mirando todo. Ella empezó a despertar de su trance. Natael se alejo ahora para permanecer lejos de su mirada.
-Vas hacer lo correcto Ángel, el bien aun sigue en ti. –dijo mientras se desvanecía. Él le faltaba decir que no había dicho no se iría sin ella, ella empezó a mirarle como un gatito asustado en la cama, se abrazo y le miro.
-¿Que ha pasado? –dijo ella levantándose de la cama.-sólo recuerdo una luz.
-te has desmallado. –dijo él que se puso de nuevo la camisa que estaba tirada en la habitación. –te he dejado en la cama, será mejor que te lleve a tu casa.
-no quiero ir. –dijo ella bajando la mirada. –no soporto a mi hermana, quiero quedarme aquí. –él la miro.
-esta bien dormiré en el sofá. –dijo él mirándola y alejándose de ella ahora. Él se marchaba ahora pero ella le hizo volverse de nuevo la miro como se arre cucaba en el almohada.
-Ángel Gracias. –cada paso que daba alejándose de ella, mas le pesaba, mas y mas, era una huida…
Continuara…
Siento lo que he tardado pero estoy bastante des concentrada con la historia, ya no queda mucho para el final, ahí teneis una pequeña escena natael y Alexia, no salen mucho los personajes principales por que todos se desarrolla alrededor de Nehira y Angel tengo que desarrollar su historia para poder desarrollar las demás. Feliz Año a todos, por cierto voy a ver toledo que sale Jaime olias.
#112
23/01/2012 15:23
me ha enantado hacia tiempo que no pasaba por el foro pero me gustaria ver escenas nataalexias ya que la de hoy no a sido mucha cosa por cierto cuando subes el proximo capitulo?
#113
31/03/2012 12:41
Vas a seguir escribiéndolo? :)
Me encanta!!!!
Me encanta!!!!
#114
06/04/2012 20:32
Capitulo 18 una verdad oculta
Nehira se estiro en la cama se miro todavía llevaba la misma ropa que el día anterior, se levanto ahora recorrió la casa pero él no estaba fue hacia la cocina vio una rosa y una nota.
Nehira he salido con mi moto, desayuna lo que quieras hay encontraras de todo, en la sala de estar ahí un teléfono llama a un taxi para que te lleva a casa,
Un beso Ángel.
Alexia caminaba por la casa que compartía con su hijastro, olio a tostadas y café recién hecho pero también olía a miedo, el que sentía Nehira por lo que diría su madre o su hermana ese día, la miro comía tranquila y pensativa mirando por la ventana.
-Buenos días. –ella se volvió todavía llevaba aquel vestido que era de fiesta. –espero que hayas pasado una estupenda noche con Ángel, ni siquiera dudo que así habrá sido.
-No señora. –dijo levantándose. –Ángel durmió en el sofá. –bajo la mirada.
-Claro, juventud, sabes algo yo conocía a tu madre. –ella la miro ahora.
-Conoce a mi madre, es una gran cirujana. –ella la miro ahora.
-pero tu eres hija Valeria, que yo sepa no es cirujana, digamos que tiene otro trabajo. –ahora cogía una fruta la mordía con una pérfida sonrisa.
-se equivoca, creo no nos conoce. –bajo un poco la mirada y luego la miro. –Es mi hermana Valeria.
-No lo sabias. –se acerco y toco su pelo ahora. –no te lo ha dicho, que es tu madre, que te abandono, por irse detrás de su Damián, como ya habrás imaginado él es tu padre. –ella se levanto con lágrimas en los ojos.
-Miente, como puede saber eso, no es cierto lo que dice, no nos conoce, no tienes ni idea, dónde esta el teléfono, por favor. –la mujer la señalo para el comedor, nehira se marcho en un taxi a su casa, mientras subía en el ascensor sus palabras sonaban en su cabeza una y otra vez, abrió con su llave y se quedo parada escuchaba una canción ahora, que venia de su habitación, era la voz de Valeria, cantaba una nana.
Duerme, duerme y sueña con ser
De tu mejor tesoro el guardián:
El amor que yo en ti he volcado
De eso tienes mucho que dar
No te engrandezcas con la riqueza
Ni te apoques con la pobreza
Que ni la derrota ni el fracaso te impidan
Ver que mañana otro día será
Duerme, duerme, aquí estaré
Las nubes serán tu colchón
Que ni el viento ni la brisa te dejen
De acariciar, pues tú eres mi Don
Duerme, duerme y sueña a tener...
Nehira sólo tenía un recuerdo de su infancia, el primero y el único que recordaba era aquella nana que le cantaba su madre. Las lágrimas cayeron por sus mejillas ahora de una manera arrebatadora, se acerco ahora a dónde ella estaba abrazaba su osito favorito, el que había tenido desde que era pequeña.
-Mama. –Valeria se levanto tirando el osito y mirándola. –por que, por que me has hecho esto, como pudiste dejarme. –Valeria ahora también lloraba y miraba los reproches de su hija. –él era más importante que yo, no me querías.
-Por favor Nehira, para mí siempre has sido mi hija, estado pendiente de ti cada segundo. –las lágrimas no la dejaban casi hablar ahora. –sabría que mi madre te cuidaría y te amaría tanto como yo, es algo que escapa a todo lo que te pueda decir, pero ahora estoy aquí. –se acerco a ella ahora, la cogió las manos. –déjame entrar en tu vida ahora, no es tarde, te quiero, te he querido todos los días de mi vida, no te abandone aunque tu creas lo contrario, algo superior me hizo marcharme, pero yo no quería, te quise desde el primer momento que me pusieron en mis brazos, todos los días de mi vida, no podría vivir si me odiaras. –se acerco ahora seco sus lágrimas ahora.
-Estoy confundida. –dijo llorando ahora. –yo veo como madre a Laia, no a ti, tu siempre has sido mi hermana la que se marcho por que se enamoro de aquel chico. –Valeria la abrazo ahora echándose en su hombro. Ella se separo ahora. –Vete Valeria, por favor, déjame en mi habitación. –ella se marcho ahora, bajo en el ascensor de su casa hacia la calle allí estaban esperando iris y Alexia que sonreía ahora.
-habéis sido vosotras verdad las que le habéis contado a Nehira la verdad. -levanto las manos y las mando un rayo a las dos que las tiro para atrás, estaba tan furiosa, se marcho a casa de Damián, solo pudo estar abrazándolo todo el rato. Él la cogió la cara ahora.
-No crees que esto ha sido lo mejor que te podía pasar, ahora mismo, puedes recuperarla. –ella se abrazo de nuevo a él. –puedes empezar a tener la relación con ella que debe haber entre una madre y su hija. –ella le miro ahora.
-te recuerdo que no es solo mi hija. –él sonrió ahora echándose el pelo que le caía en la frente hacia atrás.
-Nehira, hija. –la vio estaba abrazada a su almohada con el pijama puesto, se volvió a la que hasta ahora, había sido su madre.
-Mama o abuela como quieres que te llame. –ella la miro ahora.
-Valeria te ha contado, Nehira quiero que sepas que para mi eres mi hija, te quiero como si te hubiera llevado dentro. –le dijo acariciando su pelo, ella se volvió y se abrazo fuerte a ella.
-Para mi tu eres mi madre. –le dijo llorando y abrazándola, por la ventanita de la pantalla Natael miraba la escena ahora, sintiendo como sufría aquella chica que él consideraba también como una hija, Alexia pensó, se volvió y cerro los ojos ahora, apareció en aquella habitación, Alexia estaba como dormida en la bañera con los ojos cerrados. Abrió los ojos y lo miro el agua caía por su cara.
-Has que has venido Natael, a decirme como debo de ser a ser buena. -se levanto de la bañera y el desvió la mirada cuando se dio cuenta la tenia muy cerca mirándole a los ojos.
-Pobre Nehira que terrible es saber que tu madre no te ha querido nunca. –él se volvió y la cogió fuerte la muñeca ahora mirándola y retándola a los ojos.
-que quieres Alexia de ella, que quieres de todos nosotros. –ella le miro ahora como si acariciara el pasado de nuevo.
-yo solo quiero tu alma… -dijo mientras su voz resonaba en toda la habitación.
Continuara…
Gracias por seguir esta historia siento lo mucho que he tardado en escribir, pero estado muy ocupada, intentare escribir el final lo mas pronto que pueda.
Nehira se estiro en la cama se miro todavía llevaba la misma ropa que el día anterior, se levanto ahora recorrió la casa pero él no estaba fue hacia la cocina vio una rosa y una nota.
Nehira he salido con mi moto, desayuna lo que quieras hay encontraras de todo, en la sala de estar ahí un teléfono llama a un taxi para que te lleva a casa,
Un beso Ángel.
Alexia caminaba por la casa que compartía con su hijastro, olio a tostadas y café recién hecho pero también olía a miedo, el que sentía Nehira por lo que diría su madre o su hermana ese día, la miro comía tranquila y pensativa mirando por la ventana.
-Buenos días. –ella se volvió todavía llevaba aquel vestido que era de fiesta. –espero que hayas pasado una estupenda noche con Ángel, ni siquiera dudo que así habrá sido.
-No señora. –dijo levantándose. –Ángel durmió en el sofá. –bajo la mirada.
-Claro, juventud, sabes algo yo conocía a tu madre. –ella la miro ahora.
-Conoce a mi madre, es una gran cirujana. –ella la miro ahora.
-pero tu eres hija Valeria, que yo sepa no es cirujana, digamos que tiene otro trabajo. –ahora cogía una fruta la mordía con una pérfida sonrisa.
-se equivoca, creo no nos conoce. –bajo un poco la mirada y luego la miro. –Es mi hermana Valeria.
-No lo sabias. –se acerco y toco su pelo ahora. –no te lo ha dicho, que es tu madre, que te abandono, por irse detrás de su Damián, como ya habrás imaginado él es tu padre. –ella se levanto con lágrimas en los ojos.
-Miente, como puede saber eso, no es cierto lo que dice, no nos conoce, no tienes ni idea, dónde esta el teléfono, por favor. –la mujer la señalo para el comedor, nehira se marcho en un taxi a su casa, mientras subía en el ascensor sus palabras sonaban en su cabeza una y otra vez, abrió con su llave y se quedo parada escuchaba una canción ahora, que venia de su habitación, era la voz de Valeria, cantaba una nana.
Duerme, duerme y sueña con ser
De tu mejor tesoro el guardián:
El amor que yo en ti he volcado
De eso tienes mucho que dar
No te engrandezcas con la riqueza
Ni te apoques con la pobreza
Que ni la derrota ni el fracaso te impidan
Ver que mañana otro día será
Duerme, duerme, aquí estaré
Las nubes serán tu colchón
Que ni el viento ni la brisa te dejen
De acariciar, pues tú eres mi Don
Duerme, duerme y sueña a tener...
Nehira sólo tenía un recuerdo de su infancia, el primero y el único que recordaba era aquella nana que le cantaba su madre. Las lágrimas cayeron por sus mejillas ahora de una manera arrebatadora, se acerco ahora a dónde ella estaba abrazaba su osito favorito, el que había tenido desde que era pequeña.
-Mama. –Valeria se levanto tirando el osito y mirándola. –por que, por que me has hecho esto, como pudiste dejarme. –Valeria ahora también lloraba y miraba los reproches de su hija. –él era más importante que yo, no me querías.
-Por favor Nehira, para mí siempre has sido mi hija, estado pendiente de ti cada segundo. –las lágrimas no la dejaban casi hablar ahora. –sabría que mi madre te cuidaría y te amaría tanto como yo, es algo que escapa a todo lo que te pueda decir, pero ahora estoy aquí. –se acerco a ella ahora, la cogió las manos. –déjame entrar en tu vida ahora, no es tarde, te quiero, te he querido todos los días de mi vida, no te abandone aunque tu creas lo contrario, algo superior me hizo marcharme, pero yo no quería, te quise desde el primer momento que me pusieron en mis brazos, todos los días de mi vida, no podría vivir si me odiaras. –se acerco ahora seco sus lágrimas ahora.
-Estoy confundida. –dijo llorando ahora. –yo veo como madre a Laia, no a ti, tu siempre has sido mi hermana la que se marcho por que se enamoro de aquel chico. –Valeria la abrazo ahora echándose en su hombro. Ella se separo ahora. –Vete Valeria, por favor, déjame en mi habitación. –ella se marcho ahora, bajo en el ascensor de su casa hacia la calle allí estaban esperando iris y Alexia que sonreía ahora.
-habéis sido vosotras verdad las que le habéis contado a Nehira la verdad. -levanto las manos y las mando un rayo a las dos que las tiro para atrás, estaba tan furiosa, se marcho a casa de Damián, solo pudo estar abrazándolo todo el rato. Él la cogió la cara ahora.
-No crees que esto ha sido lo mejor que te podía pasar, ahora mismo, puedes recuperarla. –ella se abrazo de nuevo a él. –puedes empezar a tener la relación con ella que debe haber entre una madre y su hija. –ella le miro ahora.
-te recuerdo que no es solo mi hija. –él sonrió ahora echándose el pelo que le caía en la frente hacia atrás.
-Nehira, hija. –la vio estaba abrazada a su almohada con el pijama puesto, se volvió a la que hasta ahora, había sido su madre.
-Mama o abuela como quieres que te llame. –ella la miro ahora.
-Valeria te ha contado, Nehira quiero que sepas que para mi eres mi hija, te quiero como si te hubiera llevado dentro. –le dijo acariciando su pelo, ella se volvió y se abrazo fuerte a ella.
-Para mi tu eres mi madre. –le dijo llorando y abrazándola, por la ventanita de la pantalla Natael miraba la escena ahora, sintiendo como sufría aquella chica que él consideraba también como una hija, Alexia pensó, se volvió y cerro los ojos ahora, apareció en aquella habitación, Alexia estaba como dormida en la bañera con los ojos cerrados. Abrió los ojos y lo miro el agua caía por su cara.
-Has que has venido Natael, a decirme como debo de ser a ser buena. -se levanto de la bañera y el desvió la mirada cuando se dio cuenta la tenia muy cerca mirándole a los ojos.
-Pobre Nehira que terrible es saber que tu madre no te ha querido nunca. –él se volvió y la cogió fuerte la muñeca ahora mirándola y retándola a los ojos.
-que quieres Alexia de ella, que quieres de todos nosotros. –ella le miro ahora como si acariciara el pasado de nuevo.
-yo solo quiero tu alma… -dijo mientras su voz resonaba en toda la habitación.
Continuara…
Gracias por seguir esta historia siento lo mucho que he tardado en escribir, pero estado muy ocupada, intentare escribir el final lo mas pronto que pueda.
#115
17/04/2012 23:07
Me ha encantado espero que escribas el rpoximo capitulo pronto me ha encantado la escena natalexia espero la continuacion!
#116
20/06/2012 16:39
xo tamen spero con impaciencia el siguinte capi ;)
#117
15/07/2012 01:39
Me aburro de esperar 7.7
#118
13/08/2012 11:16
¿Va a volver la serie? Lo prefiero a que alguien se dedique a escribir un rollo en el internet, con perdon del escritor voluntario,pero a mi me gustaba mas la serie. ¿porque desaparecio?
#119
28/09/2012 00:27
por favor escribe la continuacion!!!
#120
03/03/2013 11:14
¿vas a seguir escribiendo? x fisss sigue x lo menos terminala no agas como hicieron con la serie ke la acabaron rápido y mal